Tres días habían pasado desde el encuentro de Kurama y Misty en Ciudad Verde, tiempo que el albino usó para pasar el Bosque Verde y llegar a Ciudad Plateada.
En el camino, él se encontró a un Ralts, lo cual era extraño porque esta especie no debería de estar en esta región.
La pobre criatura estaba asustada cuando vio al albino, pero luego de usar su [Aura], ella decidió acercarse con cautela.
Kurama aceptó a la pequeña y tímida criatura en su equipo luego de ver que ella estaba sola, sin contar que su poder Psíquico era extremadamente alto para su nivel tan bajo, haciendo que ella pudiera usar el movimiento [Teletransportación].
En estos momentos, Kurama estaba frente a un hombre de piel morena, barba larga y gorro rojo que sombreaba sus ojos.
"Espero que tu escusa sea buena, Flint" - dijo Kurama mientras entrecerraba los ojos.
El hombre de gorro rojo solo tembló al escuchar al albino hablar, después de todo, sabía que era lo que esperaba - "¡Espera, Kurama-dono!"
"Lo siento, pero tu castigo está decidido" - respondió Kurama mientras sus ojos brillaban con maldad - "Ahora, ¿Qué tal si llamas a la irresponsable de tu esposa para que vayamos a ver a Brook y tus demás hijos?"
"Ugh" - Flint asintió con debilidad mientras detrás de él, una hermosa mujer de cabello castaño claro aparecía.
"¡Hola, Kurama-kun ~!" - dijo la mujer con felicidad, solo para gritar en dolor cuando sintió como el nudillo de Kurama se fregaba sobre su cabeza - "¡Duele! ¡Duele!"
"¡Eso no es nada con el sufrimiento que les han hecho pasar a sus hijos, dúo de imbéciles!" - rugió Kurama mientras sus ojos cambiaban de color sin que se diera cuenta - "¡¿Cómo es posible que ustedes, dos adultos ya crecidos, tengan la gran idea de dejar a su hijo mayor a cargo de tantos niños?!"
"Necesitábamos un descanso" - dijo Flint, solo para tragar saliva al ver los ojos fríos del albino.
"¡¿Descanso?!" - rugió Kurama con furia - "¡¿Qué clase de padres piden un descanso de sus hijos?!"
"Ugh" - Flint y Lola solo pudieron agachar la mirada mientras Kurama los sermoneaba sin poder defenderse, después de todo, ellos sabían que estaban equivocados.
"He hablado con Brook durante las juntas de los líderes de Gimnasio, y él es un buen chico" - dijo Kurama mientras entrecerraba los ojos - "No sé como alguien como él, salió de un par como ustedes, pero supongo que se debe a que él tuvo que madurar rápido para hacerse cargo de sus hermanos menores, y posiblemente también de sus despreocupados padres"
"Ugh" - los dos adultos solo podían gemir en dolor al sentir como sus corazones eran perforados por las duras, pero ciertas, palabras de Kurama.
"El chico está dejando sus sueños atrás por culpa de ustedes" - dijo Kurama mientras miraba con repudio a la pareja - "Espero que estén felices por arrebatarles sus sueños a sus hijos"
"Ok, lo sentimos" - dijo Flint con pesar mientras miraba al albino - "No necesitas decir nada más, comprendemos nuestros errores"
"No tienen que disculparse conmigo" - dijo Kurama mientras los dos adultos veían con sorpresa como desde un rincón, un grupo de niños aparecía. Todos eran muy similares, y estaban siendo liderados por un joven de piel morena y ojos cerrados.
"Brook, niños" - murmuró Flint mientras miraba a los hijos que había dejado atrás para pasar el rato con su esposa.
"Padre" - murmuró Brook mientras apretaba el puño.
Él a duras penas estaba resistiendo las ganas de golpear al hombre que estaba frente a ellos, pero no lo hizo porque sabía que sus hermanos no tenían por qué ver esa violencia.
"No merezco que me llames padre" - murmuró Flint con pesar.
"Sí, tienes razón" - respondió Brook mientras tomaba un poco de aire - "No has hecho nada para que te dé el derecho de llamarte nuestro padre, pero mis hermanos te necesitan, no, los necesitan"
Lola se mordió el labio antes de ponerse a llorar.
Sus hijos rápidamente corrieron donde su madre y la abrazaron con cariño.
Brook vio esto mientras suspiraba nuevamente.
No importaba cuanto lo intentara, él sabía que sus hermanos necesitaban a sus padres a pesar de que ellos no fueran las personas más responsables de Kanto.
"Brook, prometo que las cosas cambiarán" - dijo Flint mientras miraba a su hijo mayor.
"Solo preocúpate de cuidar a mis hermanos, no necesitas preocuparte por mi" - respondió Brook mientras se retiraba en silencio, después de todo, él todavía tenía un trabajo como líder de Gimnasio que cumplir.
Flint se mordió el labio al ver la indiferencia de su hijo, pero no era como si pudiera culparlo, no con todo lo que ellos habían hecho contra él.
Kurama rápidamente siguió a Brook y puso su mano sobre su cabello castaño - "No necesitas ser tan duro como la roca, Brook, después de todo, eres solo un adolescente"
"Tengo que ser fuerte por mis hermanos" - respondió Brook mientras se mordía el labio - "No tengo que mostrar debilidad frente a mis padres"
"No es debilidad, hijo" - respondió Kurama mientras notaba como las lágrimas corrían por las mejillas del joven líder de Gimnasio - "Eso es, deja que tus emociones sean libres. Sé que es difícil, pero hiciste lo correcto, ahora, es tiempo de que tú también te liberes"
Kurama sabía que Brook estaba usando todas sus fuerzas para darles un escarmiento a sus padres, pero al mismo tiempo estaba lastimándose a sí mismo, después de todo, ellos eran sus padres a pesar de sus defectos.
"Gracias, Kurama-san" - murmuró Brook mientras se limpiaba las lágrimas, después de todo, él no podía ir a una batalla de Gimnasio con lágrimas en su rostro.
"Voy a estar en Ciudad Plateada por un tiempo" - dijo Kurama con una sonrisa - "Puedes venir a hablar conmigo si lo deseas, después de todo, no puedo dejar que sigas lastimándote"
"Muchas gracias, prometo que con esto yo seré más fuerte" - respondió Brook con convicción - "Usaré esto para alentarme a cumplir mis sueños"
"Y sé que lo lograrás, chico" - sonrió Kurama mientras ponía su mano en el hombro de Brook - "Tienes talento, pero mucho más importante, tienes el corazón para continuar con tus sueños a pesar de todos los problemas que la vida te ha lanzado"
Brook no dijo nada más, él asintió con firmeza mientras se preparaba para su trabajo como líder de Gimnasio, después de todo, pronto él saldría de viaje para poder cumplir su sueño.
* * * * *
Cuatro días habían pasado desde que Kurama había encarado a Flint, tiempo que él usó para poder entrenar a la nueva inclusión de su equipo.
Ralts era un Pokémon bastante inteligente, sin contar que ella tenía un instinto único para poder controlar sus poderes Psíquicos.
Kurama se estaba preparando para ver la última batalla de Brook como líder de Gimnasio, cuando vio con sorpresa como el retador no era otro que su hijo.
"¡¿Papá?!" - exclamó Ash con sorpresa a ver a Kurama - "¡¿Qué haces aquí?!"
"¡¿Papá?!" - exclamaron Misty y Brook al escuchar esto.
"Oh, cierto, nunca he mencionado mi apellido" - dijo Kurama con una sonrisa - "Mi nombre es Kurama Ketchum, es un placer"
". . ." - Misty no podía creer lo que escuchaba, después de todo, nunca pensó que la persona con quien viajaba, era el hijo de su ídolo - "B-Bueno, eso explica por qué tu Pikachu es tan fuerte"
"¡Pika Pi!" - exclamó Pikachu, quien había evolucionado del Pichu que Ash había encontrado cuando tenía 5 años.
"Hola, pequeño" - dijo Kurama mientras acariciaba al pequeño roedor eléctrico.
"¡Pika ~!" - Pikachu empezó a liberar una pequeña descarga eléctrica, aunque esta era casi inofensiva así que no había peligros.
"¿Cómo has estado, hijo?" - preguntó Kurama mientras miraba a Ash.
"Bien, incluso he logrado a capturar a un buen equipo" - dijo Ash con un brillo misterioso en su mirada - "Oh, también encontré a un Pokémon que la Pokedex no reconoció, algo como tus Pokémon, papá"
"¿Oh? Eso significa que no es un Pokémon nativo de Kanto" - asintió Kurama con curiosidad - "¿Cómo era?"
"Un ave enorme que estaba creando un arcoíris" - respondió Ash mientras intentaba recordar a ese extraño Pokémon.
La expresión de Kurama cambió cuando escuchó esto mientras se ponía a pensar - "Dime Ash, ¿Ese Pokémon tenía unas hermosas colas de 7 colores?"
"¿Conoces a ese Pokémon, papá?" - preguntó Ash con emoción porque era primera vez que sentía excitación por un Pokémon.
"Su nombre es Ho-oh, el creador de Arcoíris" - respondió Kurama mientras se ponía a pensar - "Es uno de los Pokémon legendarios de Johto junto a Lugia, el guardián de los mares"
"Ho-oh" - murmuró Ash mientras Misty y Brook se quedaban en silencio porque era primera vez que escuchaban de este Pokémon.
"Por cierto, las leyendas dicen que este Pokémon puede dar la vida eterna a quien logre tocar su cola de siete colores" - agregó Kurama mientras miraba a Ash - "Esta leyenda nació luego de que Ho-oh reviviera a tres Pokémon que murieron un incidente años atrás en Ciudad Iris"
"Escuché sobre eso" - dijo Misty mientras miraba a Kurama - "Recuerdo que mis padres me contaron sobre ese incidente, dicen que las Tres Bestias Míticas, nacieron en ese incidente, aunque no sé mucho más"
"Entei, el Pokémon volcán, Raikou, el señor del rayo, y Suicun, la encarnación de los vientos del norte" - respondió Kurama mientras sacudía la cabeza.