Takashi estaba mirando a Hisashi, que irónicamente estaba frente a los muebles que bloqueaban las escaleras que daban al observatorio, apuntando con una manguera.
Con la ayuda de Saya, la manguera podía obtener suficiente presión para hacer un hoyo en la madera, al menos según ella, pero era suficiente con derribar los muebles y a "Ellos".
Pero Saya que estaba detrás de Takashi, mientras cargaba en su espalda una mochila con dos de las "armas" de Takashi, y agarraba fuerte su "bastón" que tenia los extremos en forma de "T", aun estaba muy nerviosa, y se pego un poco a Takashi.
- No te preocupes, esas cosas son lentas y rígidas, mientras te pegues a la pared y no dejes que te tomen por la espalda, el bastón los mantendrá alejados, y Rei, Hisashi o yo, nos encargaremos de lo demás –dijo Takashi a la chica asustada, la cual solo asintió y puso la mirada más firme y despreocupada que pudo hacer.
- ¡Listo! Rei, ¡Ahora! –anuncio Hisashi.
En un instante, una ráfaga de agua salió de la manguera en manos del chico, y golpeo los escritorios, lo que provoco que salieran volando y empujaran a "Ellos", haciendo que unos cuantos estrellaran su cabeza con el suelo y se rompieran.
Hisashi roció más agua y empujo a varias de esas cosas para apartarlas de la puerta, o dispersarlos un poco.
Rei bajo rápidamente con Hisashi, mientras llevaba dos "lanzas", Hisashi no se acomodaba con la "espada" y la "funda" anteriores, y tomo una especie de "lanza" muy parecida a la de Rei, solo que esta era un poco más pesada y burda, que podría funcionar como un bastón para golpes contundentes.
En realidad, Takashi también le iba mejor con un bastón o lanza, por eso pidió que se hiciera, pero el tamaño no era adecuado para los pasillos del instituto, o luchar con aliados, al menos según su estilo.
Luego observo como Rei usaba la parte posterior de su lanza, que estaba en forma de "T", para golpear a uno de "Ellos" en el estomago, mientras Hisashi lo golpeaba en la cabeza, aprovechando la oportunidad.
- Supongo que trabajan bien juntos como es de esperar, a pesar de… –la única que escucho sus palabras era Saya, que estaba detrás, y miro a Takashi sin saber que pensar o decir.
Cuando uno de "Ellos" se acerco, Takashi solo hizo un ligero empuje en forma de puñalada, con su espada, que en realidad, servía mas para ello, que para cortar, pues estaba compuesta de una varilla en forma de aguja, era la "funda", que era un tubo de cañería, la que funcionaba bien para golpes contundentes, así que Takashi tenía uno en cada mano.
Cuando la puñalada paso por la cabeza del cadáver andante, entro de forma muy simple, como si fuera un cuchillo de carnicero entrando en queso.
Takashi, para bien o para mal, tenía la "experiencia" en muchas de estas cosas, lo cual debía agradecer a su "sueño", pero, para bien o para mal, también era una experiencia nueva, al menos desde una perspectiva diferente.
Takashi se desconcertó por un instante de lo fácil que parecía, y del pensamiento peculiar que pasó por su mente, respecto a que un humano no sería mucho más difícil de asesinar.
Pero recupero rápidamente sus sentidos y le dio con la "funda" a uno de "Ellos", que se acercaba desde su izquierda, y luego retrocedía para esquivar a otro desde su derecha, el cual apuñalo en la nuca cuando paso por enfrente de él.
Luego pateo ese cadáver hacia las piernas del otro que había hecho retroceder, lo que provoco que este callera de bruces y Takashi lo golpeara en la nuca, para que no se volviera a mover.
Retrocedió una vez mas y golpeo a una de esas cosas que había querido acercarse a Saya, y luego avanzo con otra puñalada simple hacia uno más que se aproximaba.
De esta forma, golpeando con la "funda", y apuñalando con la "espada", al tiempo que usaba los propios cuerpos de "Ellos", para derribarlos o bloquearlos, Takashi fue destruyendo una tras otra de esas cosas.
No se dio cuenta que Saya lo miraba de forma asombrada, con una mezcla de conmoción y sentido de seguridad que se extendía por su cuerpo.
Hisashi y Rei también destruyeron a varios de "Ellos", pero fue con la combinación de los dos, ambos se dieron cuenta también de lo que había hecho Takashi, pero estaban entre conmocionados y asombrados, así como presionados por la situación, por lo que se tragaron sus dudas y preguntas.
Luego vieron a Takashi apuñalar a todos, incluso los que no se podían mover o ya estaban… "destruidos", a falta de una mejor palabra.
Cuando Takashi apuñalo al último, una "chica", se arrodillo, y acaricio su cabeza, irónicamente, esto quito la imagen "abrumadora" y un tanto terrorífica que había implantado en las mentes de sus tres compañeros, unos minutos antes.
- ¿La conocías? –pregunto Rei en un tono suave, ya que parecía el mejor momento para hablar, pues en gran parte gracias a Takashi, ya no quedaba ninguno de "Ellos" en la azotea.
- … …. Un poco –respondió Takashi, no podía decir, que estaba buscando signos de "poder" que se moviera a través de su cuerpo con la ayuda de "Ellos", y que esta "niña", era la que parecía más "fuerte" entre estos cadáveres andantes– Vamos.
Lamentablemente "Ellos" aun eran muy débiles para causar una reacción que no fuera psicológica en los humanos, y el también era demasiado débil, para saber dónde y cómo, empezar a buscar.
De esta manera, con Hisashi al frente, Rei a su lado solo unos centímetros por detrás, Saya detrás de ambos, casi en medio y Takashi en la retaguardia, comenzaron a descender,
La razón por la que Takashi había insistido en ir hacia la azotea, a pesar de tener otras opciones, era porque se preocupaba por Rei y Saya, que mientras una es muy valiente y con mucho impulso, y la otra es muy inteligente y estable, también pueden ser muy necias y confiadas, y bajo esta situación, el considero que mostrarles el estado de la ciudad, aunque las asustaría y estresaría, las frenaría de actuar con temeridad y querer salir corriendo para averiguar de sus padres.
Claro, esto solo funcionaria a medias, pero al menos les daría una cierta perspectiva, y por supuesto, Takashi quería que ellas lucharan de frente con el mayor numero de "Ellos" que fuera necesario, pues sabía que solo el combate directo contra esas cosas, era la primera clave para poder desarrollar un mayor poder, luchar y sobrevivir ante las abominaciones que se avecinaban o más exacto, que se formarían.
Había un número limitado de "Ellos" en los pasillos, pero todavía eran una molestia para moverse, Takashi había logrado que Saya destruyera a uno, mientras él, intentaba no dejar ninguno de pie.
En realidad aunque el tubo de Saya estaba en ambos extremos en forma de "T", eso se debía a que ella no sabía usar una lanza y solo se lastimaría, por lo que su "arma", solo era adecuada para golpes contundentes, pero la misma Saya no era muy fuerte, así que Takashi había pedido ese tubo especialmente pensando en ella, el material aunque firme era menos pesado, y a los lados de la "–" tenia pequeñas varillas que podían apuñalar, pero que no se podían clavar muy profundamente, lo cual disminuía el riesgo de atorarse.
Estas "armas" estaban destinadas a destruirse, pero en la casa de Saya, quizás encontraran otras cosas que Katanas y armas de fuego, que pudieran adaptarse a Saya.
Incluso si Saya terminaba por rendirse al combate de cuerpo cercano, Takashi esperaba que ella se acostumbrara, tanto para una situación de emergencia, como por el hecho que es la mejor manera de sobrevivir en el futuro, por supuesto, su opinión podría ser un poco sesgada, pero creía que era la mejor.
Así, continuaron avanzando, hasta que en un cierto piso, escucharon un sonido estridente, como un cuete o un disparo.
Cuando se acercaron al lugar de donde venia el sonido, encontraron a un chico que tenía una rodilla en el piso y usaba una especie de pistola de clavos para destruir varias de esas cosas, mientras una chica usaba lo que parecía una parte de un escritorio, para golpear a los monstruos que se acercaban, o lanzaba una silla para derribarlos.
No hacía falta decir que el chico era Hirano Kohta, el media 1:60, aunque era gordo, aparte de su estomago y cara, las demás partes de su cuerpo, parecían más robustas que obesas, tenía el pelo un poco largo, al menos para un hombre, era de color oscuro al igual que sus ojos y tenía unas gafas de marco muy grueso.
La chica por otro lado era alta, de 1.71, con el pelo rubio, aunque era obvio que estaba pintado, pues también tenía mechones rojos, y sus ojos parecían heterocromaticos, pero dado que uno era verde, mientras el otro era rojo, hacia evidente que solo usaba un pupilente, parecía tener una pequeña cicatriz en ese ojo "rojo", pero por lo demás era muy hermosa, y con unas piernas muy largas, que usaba para lanzar patadas, demostrando que sabia Taekwondo.
Parecía que incluso sin Saya, Kohta encontraría ayuda y su camino,
Antes de que alguien pudiera adelantarse para ayudar, dos personas más llegaron por otro pasillo, eran Shizuka Marikawa, la cual parecía un poco cansada, un poco triste y un poco pálida, y a su lado Saeko Busujima.
Loa ojos de Takashi no pudieron evitar brillar cuando vio a Saeko, era alta, al igual que Hisashi de 1.75 quizás incluso 1.76, su pelo era completamente negro hasta la cintura, y sus ojos también eran negros, su expresión era seria y un poco fría, que con sus facciones afiladas y exquisitas, la hacían lucir demasiado hermosa, aunque al lado de Shizuka, sus pechos parecían pequeños, en realidad también eran adecuadamente llenos, logrando que su figura fuese, al menos, en opinión de Takashi, una obra de arte como ninguna otra.
- Mi nombre es Saeko Busujima, tercer año, capitana del club de Kendo –hablo Saeko al notar varias miradas hacia ella, dando una leve sonrisa muy elegante, que aturdió a todos los hombres presentes, incluido Hisashi que era el más serio y tenía una novia con suficiente belleza.
- Yaaa, yo soy Mitsui Nana, primer año, recién transferida –grito la chica en un tono alegre, mientras lanzaba una silla de las cuatro que le quedaban, el "muerto" termino cayendo cerca de Takashi, que aun no entendía como había traído tantas sillas hasta aquí– Lo siento sempai.
- … no hay problema, yo soy Komuro Takashi, segundo año, yo soy bueno… -dijo Takashi, mientras Saya aprovechaba para golpear al monstruo con su bastón y destruirlo, al tiempo que él, ponía su pie bajo la silla y usaba un lanzamiento para mandarla hacia un grupo de "Ellos" que parecía que iban a rodear a Rei, haciendo que estos se desequilibraran y cayeran– … cazando zombis.
- … yo soy Hisashi Igou, segundo año, club de Karate, Busujima-sempai, creo que deberíamos terminar aquí pronto, antes de seguir con las presentaciones.
Después de eso, terminaron destruyendo los "cadáveres" que se encontraron, mientras se dirigían al salón de profesores.
Al llegar, todos se sentaron e intentaron relajarse, algunos tomaban agua y otros cerraban los ojos, Takashi encontró un cojín y se sentó en el suelo, mientras cerraba los ojos e intentaba sentir algo, de lo cual no logro mucho.
Pronto se inicio una conversación, después de haber escuchado las noticias que se transmitían por televisión.
Palabras como "virus" y "epidemia", empezaron a salir, referencias al "orden" y la "seguridad", eran algo que Hisashi y Saya debatían.
Shizuka intentaba dar entender que "Ellos", pronto se "pudrirían" y ya no serian una amenaza, pero sin alterar la situación presente.
Entonces la conversación giro en menor medida a la causa de la aparición de "Ellos", y de cómo deberían actuar a partir de ahora.
Algunas ocasiones, Rei perdía la paciencia, se alteraba un poco, y decía comentarios idealistas, mientras Saya la despertaba con la fría verdad, pero su actitud daba a entender que también creía y esperaba que lo que Rei decía se convirtiera en realidad.
Saeko solo escuchaba y daba un poco de opinión, sobre todo para la forma de defenderse de "Ellos" y la forma de moverse.
Nana tenía una cara entre frustrada y preocupada, pero de alguna manera decidida, parecía solo estar considerando sus opciones, mientras que Shizuka y Kohta solo interferían de vez en cuando.
- ¿Y usted qué opina Komuro-sempai? –pregunto Mitsui Nana repentinamente, pues le parecía raro, que durante todo este tiempo, Takashi solo tuviera los ojos cerrados y actuara como si estuvieran discutiendo sobre deporte.
- … es verdad Komuro-kun, antes parecías muy activo eliminando a… "Ellos", pero ahora pareces muy despreocupado –añadio Saeko, ella también había notado su comportamiento peculiar, pero no se conocían bien y no era su turno de interrogarlo, pero con la pregunta de Nana, que parecía no preocuparle nada, ella aprovecho para hacer un comentario.
- … tal vez esas cosas son el resultado de una maldición del infierno, y ahora tenemos que encontrar la manera para sublimar nuestras almas, y así, poder combatirlos –ante la respuesta de Takshi, todos se quedaron sin palabras.
Shizuka, Nana y Kohta solo abrieron los ojos como si hubieran llegado a algún tipo de realización, Rei puso sus dedos en su frente como si estuviera molesta y frustrada.
Saya estaba mirando directamente a Takashi, como si intentara descifrar un significado oculto en sus palabras, pero no sabía que decir, el chico la había estado apoyando y cuidando desde que todo esto comenzó, así que no quería decir nada malo, incluso si era sobre ese tipo de palabras absurdas.
- ¡Takashi!, este no es un momento para bromas y tonterías, estamos teniendo una conversación seria aquí –dijo Hisashi con las cejas surcadas, demostrando que estaba seriamente molesto por la broma de su amigo.
- … pero si estoy siendo serio –dijo Takashi– … al menos de alguna manera. Yo nunca he entendido porque los zombis nos quieren comer, sobre todo cuando vienen de películas en las que se supone que todo es causado por un virus ¿ustedes lo saben?
- … … –todos se quedaron sin palabras una vez más.
- Según Saya, esas cosas no pueden ver, no pueden escuchar, así, no deberían sentir hambre, por no hablar de la digestión, de la misma manera, no deberían tener recuerdos o instintos, lo que nos lleva a que no deberían querer comernos.
- Desde el principio, incluso si me hablas de alguna lógica retorcida, ya es extraño que los cadáveres se levanten y caminen –continuo Takashi– el que quieran comernos es sumamente ridículo, al menos para mí, así, que si esto no es un fenómeno antinatural, un fenómeno sobrenatural, yo nunca estaré convencido.
- … … –nadie podía negar ese tipo de lógica, aunque muchos no pudieran estar de acuerdo, por lo que nadie pudo responder, claro, Takashi solo pretendía que sus palabras sembraran la semilla para que aceptaran que "Ellos", fuesen algo más que el resultado de una enfermedad.
- Así, yo prefiero llamarlos "Caminantes de la Muerte" –dijo Takashi, empezando hablar una vez más después de un breve silencio– Respecto a qué hacer ahora, yo digo que deberíamos quedarnos en la escuela por el momento.
- … es absurdo –respondió Rei esta vez– necesitamos salir, quedarnos escondidos aquí no lograra nada. Takashi…
- Basta Miyamoto –interrumpió Saya– Takashi solo está dando una opinión, recuerda que no eres la única con familia, pero correr atreves de… esos Caminantes, no lograra nada, solo tu propia muerte.
- Pero…
- Takagi tiene razón Rei, tranquilízate –interrumpió Hisashi esta vez– En realidad creo que quedarse en la escuela no es tan mala idea.
- ¿Por qué Sempai? –pregunto Nana, que también parecía darle gran importancia a las palabras de Hisashi.
- Eso se debe a lo que acabamos de ver por televisión y lo que vi en la azotea, no importa si es una enfermedad o algo mas, no es importante, al menos por el momento, si todo puede regresar a la normalidad, es un hecho que este problema no se arreglara en dos o tres días, los motines ya empezaron y el gobierno ya comenzó a tomar medidas con fuerza, ni siquiera es seguro que podamos sobrepasar el rio si salimos, por no hablar, que en ciertas circunstancias, las personas histéricas y con miedo, son más peligrosas, y todo eso es lo que sucederá hoy en un auge espantoso, aunque quizás las cosas no se calmen mañana, pero no será tan caótico, independientemente de lo que suceda.
- Entonces, ¿qué deberíamos hacer, Hisashi? –una vena palpito en la sien de Saya, cuando escucho a Rei, de manera dócil, aceptar las palabras de Hisashi, aunque en cierto punto, ella también estaba de acuerdo, no pudo evitar pensar que era algo injusto para Takashi, quien dijo la idea primero, incluso si no explico nada. Solo pudo murmurar "hipócrita" e ignorar su propia insatisfacción.
- Debemos dirigirnos hacia el comedor e intentar asegurar algunas provisiones, ¿tú qué opinas, Takashi?
A la pregunta de Hisashi, Takashi solo asintió, no estaba molesto, solo pensaba, que como era de esperar de Hisashi, era adecuado para ser un líder.
En realidad Takashi había olvidado por completo las provisiones, en su "sueño", con la situación y su fuerza, eso era algo muy fácil de conseguir, y en la actualidad, estaba más preocupado por "Despertar" el poder necesario para enfrentar lo que se avecina, que en su situación en sí misma.
Por lo que agradeció que Hisashi no solo pensara en ello, si no que le diera el pretexto adecuado, para quedarse en la escuela y destruir más Caminantes, de una forma constante.
Respecto a Rei… ella ya tenía a Hisashi, él, prefería centrarse en Saya y en Saeko.
A Saya le debía mucho y quería cuidarla, claro, no negaba que si podía hacerla suya, lo haría tan pronto como se presentara la ocasión, mientras que Saeko, era la mujer en la que mas estaba centrado, para Takashi, ella era la mujer ideal para tener en este Apocalipsis, y su corazón palpitaba de emoción de pensar en obtenerla.
Pero si podía, ya que no era el mismo Takashi de la historia original y este no era un manga, solo el tiempo lo diría.