Capitulo 4.- Niñero

Y una vez mas el chico de suerte rojo y gorra azul, osea Manuel, se encuentra junto a la maquina expendedora averiada, pero esta vez un grupo de 20 niños lo acompaña.

Luego de que dejara de prestarle atención al bravucón de Robinson y sus seguidores los niños le siguieron hasta la maquina expendedora en donde tomaron asiento en el suelo y obedecieron a Manuel en todo como les había ordenado Aguilar.

Los soldados conversan sobre la precaria situación y sobre los posibles casos que puedan ocurrir.

Aguilar llega junto a los niños, Manuel sin mas le pide el favor de abrir la maquina expendedora y el con la culata de su arma rompe el cristal dejando todo el contenido a disposición de los niños.

A la distancia un gordo bravucón, (Robinson) mira a Manuel y a todos los niños comiendo con una sonrisa.

- tch, vamonos de aquí - chasqueando los dientes voltea la mirada para luego el y su grupo dirigirse hacia los pasillos que llevan a las escaleras.

Tras romper la maquina, Aguilar le ordena a Manuel que repartiese los dulces a los niños y se encargara de que no se los acaben tan rápido y como si fuera uno de sus soldados Manuel acepta con un " ¡¡si Señor!! " saludando como soldado, de esta forma se encargo de cuidar a todos los niños, y en particular a Naomi quien de la nada parece haberle tomado cariño a Manuel pues no se aparta de el.

Sentada en su regazo, la niña come tranquila una bolsa de galletas con chispas de chocolate mientras tararea, Manuel no diría que esta feliz si no todo lo contrario, su ojo izquierdo palpita mientras las venas se marcan en su frente mostrando una falsa sonrisa, ocultando su irritación por las constantes causada por las preguntas de los niños.

"Dios dame paciencia por Favor" grita Manuel en su mente.