Capítulo 174: Festival Bakugyaku

Una semana había pasado en Nangokuren y los estudiantes estaban caminando hacia sus clases mientras todavía conversaban sobre lo que había sucedido tantos días atrás, después de todo, como terminó la Ceremonia Batsuzangaisei, fue demasiado épico para ellos.

En estos momentos, Cloud y los demás estaban escuchando nuevamente a Okina hablar sobre la como tenían que aprovechar su juventud para no arrepentirse luego.

"Al menos es mejor que cierto dúo lleno de Juventud..." - murmuró Cloud mientras un escalofrío recorría su espalda al recordar a dos alíens verdes del mundo de Naruto.

"Sigo pensando que lo que ella fomenta, no está permitido en el currículo como profesor" - respondió Chifuyu con una mirada casi neutral. Okina no era una mala maestra, de hecho, era extremadamente capaz en su oficio, pero su perversión estaba sacando lo peor de ella - "Al menos no es un hombre... eso sería perturbador..."

"Oh... se me olvidaba, recuerden que los exámenes están a la vuelta de la esquina, así que tienen que prepararse lo mejor que puedan" - dijo Okina con seriedad.

"!" - las chicas abrieron los ojos en sorpresa cuando escucharon esto porque los exámenes significaban una cosa.

"Así es, 'eso' también está por comenzar" - dijo Okina mientras las chicas se miraban entre ellas con llamas en los ojos.

"¿Eso?" - preguntó Shizuka mientras ladeaba la cabeza en confusión.

"Oh, cierto, ustedes son estudiantes que han entrado en medio semestre" - dijo Okina con calma - "Verán, durante los primeros exámenes del segundo semestre, Nangokuren celebra uno de sus eventos más importantes, el Festival Bakugyaku"

"¿Festival Bakugyaku?" - preguntó Chifuyu con sorpresa. Ella no podía encontrar una conexión entre un festival y unos exámenes.

"Exacto, el Festival Bakugyaku" - asintió Okina con seriedad - "Es un evento que hace que los chicos de primer y tercer año puedan conocerse mejor, tomando a los mejores 6 de cada año para que hagan pareja con el estudiante que tenga el mismo puesto"

"¿Eso significa que el primer lugar del Primer Año, tendrá que hacer pareja con el primer lugar de Tercer Año?" - preguntó Chifuyu con curiosidad.

"Exacto" - asintió Okina - "Aunque esto no es necesariamente una ventaja para los que están en la cima, ya que el evento del festival es escogido aleatoreamente por nuestro director a través de un... proceso un tanto peculiar"

"Ya veo..." - asintió Chifuyu mientras asentía.

"¿Hay algún incentivo para los participantes?" - preguntó Shizuka con emoción.

"Lo siento, no puedo decirlo" - respondió la profesora - "Aunque el premio depende de que decidan los dos directores de Nangokuren"

"Es por eso que quiero que den todo en los exámenes" - sonrió la profesora mientras un sonrojo aparecía en sus mejillas, para luego abrazarse a si misma - "¿Quien sabe?¡Tal ve les dé un premio extra~!¡Hyan~!"

"¡Seré el primer lugar, Okina-chan~!" - exclamó Tamao mientras Kousuke miraba a la profesora como un perro en celo.

". . ." - Rintarō por su parte, solo negó con la cabeza. Luego de una semana de consumir la poción de Cloud, su salud estaba al 100%, aunque todavía tenía el reflejo involuntario de calmar su mente y corazón.

Durante este tiempo, Rintarō le enseñó a Cloud las base de Ryūha Koei Sōgetsu, aunque se sorprendió al ver lo fácil que el chico había absorbido toda la información. Cloud había logrado calmar su mente y corazón en tan solo unas horas, aunque todavía necesitaba mucha práctica para poder llegar a un estado de paz total.

"Okina sensei-chan, deberías abrir un poco más tu escote para mostrar algo más de piel y tu nivel de ataque subiría en un 25% como mínimo" - dijo Cloud al ver a la profesora. Él tenía que admitir que estaba disfrutando sus clases con tan 'animada' tutora - "¿Tal vez podría usar un brasier negro para aumentar aún más el poder destructivo?"

"No le des ideas. Cloud" - dijo Chifuyu mientras se tomaba el puente de la nariz

"Tomaré tu primer consejo" - asintió Okina con una sonrisa - "Y para que quede como dato, siempre uso ropa interior negra... ¿quieres ver~?"

"¡Sí!" - exclamaron los dos chicos pervertidos, o mejor dicho los que no podían controlar su perversión.

"Sensei... no creo que eso sea apropiado" - dijo Ayane con el ceño fruncido.

"Tranquila, Senseiryū, solo estoy bromeando" - dijo Okina mientras miraba a su estudiante - "Si realmente quisiera mostrarle mi ropa interior, lo haría en privado"

"¡Ese no es el problema!" - exclamó Ayane mientras veía como la profesora soltaba una carcajada.

En estos momento, ninguno en la clase sabía si la profesora estaba hablando enserio o solo estaba bromeando con ellos.

* * * * *

"¿Es esto cierto, Asuna-sama?" - preguntó Rurina con emoción.

"Sí... me lo comprobó él mismo" - asintió la Líder del Comité Disciplinario.

"Bueno, al menos eso explica porque siempre escapaba de mi hermana" - asintió Rumina mientras veía como su gemela parecía haber ascendido al cielo.

"¿Eso significa que tengo una oportunidad?" - preguntó Rurina con emoción.

"Eso creo" - asintió Asuna mientras se encogía de hombros - "Por cierto, será mejor que hagas tu movimiento lo antes posible porque he escuchado rumores que una de las subordinadas de Senseiryū, ha estado rondando alrededor suyo"

"¡Rival de amor!" - exclamó Rurina mientras sus ojos se encendían.

"¿Qué hay de ti, Rumina?" - preguntó Asuna con curiosidad.

"N-No sé de qué está hablando, Asuna-sama..." - dijo Rumina con el rostro rojo.

"Oh, vamos... no puedes ocultarme el hecho de que has estado espiando a Rintarō-san" - respondió la chica de cabello negro mientras notaba como Rurina miraba a su hermana con seriedad.

"¡N-No es lo que parece, Rurina!" - exclamó Rumina con el rostro rojo.

"¡No hay problema, Rumina! "- exclamó Rurina mientras una sonrisa aparecía en su rostro - "¡Eres la persona que más quiero, así que no me molestaría compartir contigo a Rintarō-sama~!"

Rumina se sonrojó nuevamente pero lentamente asintió. Las dos eran gemelas idénticas, así que sus gustos eran prácticamente iguales.

"Como les dije, será mejor que hagan su movimiento lo más pronto posible" - dijo Asuna con calma - "Keiko-san ha estado últimamente pegada a Rintarō-san"

"¡Rival de Amor!" - exclamó Rurina mientras su hermana negaba con la cabeza. Rumina sabía muy bien que su hermana gemela era extremadamente celosa.

"¿Qué hay de usted, Asuna-sama?" - preguntó Rumina mientras miraba a su líder.

"?" - Asuna le dio una mirada confundida a su subordinada porque no comprendía que era lo que trataba de decir.

"¿Cuando va a hacer su movimiento?" - preguntó esta vez Rurina - "Digo, es obvio que usted está interesada en Cloud-sama"

"Oh... te refieres a eso..." - dijo Asuna con el rostro ligeramente rojo, aunque rápidamente se calmó - "Mi cuerpo y alma le pertenece a Cloud-sama... así que solo tengo que esperar por sus instrucciones"

"Si recuerdo bien, él nos dijo que no necesitaba a unos títeres sin vida que no puedan tomar sus propias decisiones" - dijo Rurina mientras miraba a Asuna - "Si no hace las cosas por si misma, entonces Cloud-sama nunca la aceptará como usted desea"

"Lo sé... pero no tengo problemas por el momento con mi situación actual" - respondió Asuna mientras miraba por la ventana - "Por ahora estoy feliz con sentir la apreciación que Cloud-sama tiene por mi... nada más me importa en estos momentos"

". . ." - las dos gemelas solo negaron con la cabeza cuando escucharon esto porque ellas sabían lo mucho que su líder deseaba la atención de los demás y el ser reconocida.

"Pero cambiando de tema, vayan y tomen eso que tanto desean" - dijo Asuna con una sonrisa, una que no había aparecido en su bello rostro en años. Desde que ella había estado trabajando para Cloud, su actitud había cambiado 180°. Su personalidad astuta y manipuladora todavía estaba escondida debajo de su sonrisa llena de felicidad, aunque había que decir que al menos ahora ella tenía una línea de fondo que no quería cruzar porque iba en contra de los ideales de su líder.

"¡Hai, Asuna-sama!" - exclamaron las gemelas mientras salían por la puerta.

"Nunca pensé que terminaría cambiando tan al tener una persona que me reconoce" - murmuró Asuna mientras negaba con la cabeza - "Será mejor que continúe con mi entrenamiento... una lástima que no pueda convertirme en un dragón... aunque Cloud-sama me dijo que un Tigre no estaba lejos de la realidad..."

* * * * *

"¡Achu!" - estornudó Rintarō mientras miraba alrededor - "Extraño... ¿tal vez alguien está hablando de mi?"

"Posiblemente" - respondió Cloud mientras devoraba el almuerzo que había hecho Shizuka.

En estos momentos era hora del almuerzo y el grupo estaba reunido junto a Ayane y sus chicas. Asuna dijo que no podría almorzar con ellos hoy porque ella dijo que estaba a punto de romper una barrera que sentía que la había atrapado por años.

"Me pregunto que tan fuerte será Asuna cuando termine con su entrenamiento..." - dijo Makoto mientras miraba a su confiable lanza japonesa - "Nunca pensé que diría esto, pero deseo poder medirme con esa chica"

"¿Quieres?" - preguntó Keiko mientras sacaba un plátano desde su pechos y se lo entregaba a Rintarō.

"¡N-No, gracias!" - dijo Rintarō con vergüenza. Puede que ahora que está curado, él pueda interactuar con mujeres, pero eso no quitaba el hecho de que todavía era vergonzoso hablar con una chica así de sexy como Keiko.

"Por cierto... ¿alguien puede decirme de donde salió este amiguito?" - preguntó Shizuka mientras miraba como un pequeño hamster rojo estaba comiendo sobre sus enormes pechos.

"Si recuerdo bien, este es el hamster de Hatenko" - dijo Ayane con sorpresa - "¿Pero qué es lo que hace aquí?"

(Eso puedo responderlo yo) - le susurró Erin.

"¡Kya!" - exclamó Ayane con sorpresa. Ella nunca pensó que alguien le hablaría tan sorpresivamente.

Erin se acercó a Shizuka y le susurró.

"Ella dice que lo siente" - dijo Shizuka mientras los demás miraban a la chica recién llegada con una gota de sudor corriendo por sus nucas.