Capítulo 550: Destino

Al día siguiente, Cloud y los demás estaban reunidos en una plaza cercana.

Coco Loo había sido enviada a un lugar especializado para solucionar sus problemas, pero no sin antes decirle que si necesitaba algo, siempre podía usar la tarjeta que le pasaron.

La antigua guía turística asintió y dio un pequeño "gracias" antes de irse, después de todo, el grupo había hecho demasiado por ella, aunque si era sincera, estaba avergonzada de que no pudiera agradecerle al hombre que la había salvado por culpa de su trauma.

En fin, Cloud y los demás estaban esperando a Netero, quien les había informado que había aceptado, cosa que el rubio comprobó al recibir su notificación junto a una segunda llamada del viejo antiguo presidente de la asociación sobre cómo el flujo de información había sido extremadamente doloroso.

"¿Viajaremos a otro mundo desde este sitio?" - preguntó Menchi con el ceño fruncido porque había demasiada gente en los alrededores.

"Tranquila, esto es normal" - respondió Kyōka mientras negaba con la cabeza - "Solo observa en silencio y lo comprenderás todo"

Menchi todavía estaba un poco escéptica, pero asintió a las palabras de su "senpai".

Luego de unos minutos más, Isaac Netero apareció en el lugar.

"Lamento la demora, estaba haciendo unos últimos arreglos" - dijo Netero mientras negaba con la cabeza.

"Tranquilo, en el momento que nos vayamos, el tiempo se detendrá en esta dimensión hasta que regresemos" - respondió Cloud con calma, sorprendiendo a los dos nuevos reclutas.

"Interesante, tu poder es mucho mayor del que pensaba" - murmuró Isaac Netero mientras acariciaba su mentón.

"No es mi poder, yo solo soy un agente" - respondió Cloud con honestidad - "Supongo que esa parte de la información no fue transmitida, como sea, les informaremos el resto en nuestra base de operaciones"

Menchi estaba a punto de preguntar más sobre el tema, cuando notó algo que la dejó fría.

Isaac Netero también estaba sorprendido de lo que estaba aconteciendo, después de todo, podía notar como el mundo parecía haberse congelado por el cambio tan drástico en la tonalidad de los alrededores.

[Por decisión del usuario, el tiempo de estadía ha sido reducido, iniciando el proceso de transportación]

[Por favor retrocedan unos cuantos metros mientras se genera el portal]

Isaac estaba maravillado por este extraño sentimiento de aventura que no había sentido en años.

Menchi podía sentir como su corazón parecía querer escapar de su pecho ante la emoción de este futuro incierto.

Lentamente, un extraño portal azulado empezó a materializarse frente al grupo.

[Portal generado, por favor entren con cuidado]

Sin decir nada más, la extraña voz robótica desapareció, dejando al grupo mirando el portal en silencio.

"Ok, es la hora" - declaró Cloud mientras le indicaba a Kyōka y Kyoko que entraran.

Las dos mujeres lo hicieron sin pensarlo dos veces, después de todo, esta no era su primera vez moviéndose entre dimensiones.

"¿Algún efecto adverso que tengamos que saber sobre el viaje entre mundos?" - preguntó Netero mientras miraba al rubio.

"La primera vez siempre causa mareos, nada fuera de lo normal o letal" - respondió Cloud mientras se encogía de hombros.

"Ok" - asintió Netero mientras entraba al portal.

"Sigues tú" - sonrió Cloud mientras notaba como Menchi seguía mirando el portal en silencio - "¿Menchi?"

"Oh, lo siento" - respondió Menchi con vergüenza antes de entrar al portal.

Kurama miró hacia atrás, en dirección de la distancia antes de seguir a su grupo de regreso a casa.

* * * * *

"¿Sucede algo, Meruem?" - preguntó una joven mujer de cabello blanco desordenado.

"No, no es nada" - respondió el Rey Hormiga Quimera mientras miraba a la chica que había conocido por azares del destino.

Ellos se encontraron durante su escape.

Él estaba corriendo a toda velocidad lo más lejos posible de Cloud, cuando escuchó algo sobre cómo un grupo de ladrones había logrado capturar a la campeona mundial de Gungi.

En un principio, él estaba desinteresado, pero cuando estaba a punto de retirarse, el grito de la chica lo hizo recapacitar, como si algo dentro de él le dijera que si no se movía ahora, en el futuro se arrepentiría.

Meruem apretó los dientes y rápidamente se lanzó contra los ladrones y mató a cada uno de ellos hasta que llegó a una celda donde estaba una lastimada chica de cabello blanco desordenado y con ropas ligeramente maltrechas.

Meruem se acercó lentamente a la chica y revisó que estuviera bien, aunque fuera del claro abuso físico, ella parecía estar en buen estado.

Posiblemente, los ladrones no abusaron de ella porque la chica no era muy hermosa en estándares humanos.

Komugi lentamente abrió sus ojos al sentir como todo había terminado y ahora estaba segura, una sensación que ella no podía explicar, y "miró" a su salvador.

Meruem se quedó mirándola en silencio mientras pensaba que esto había sido una pérdida de tiempo, aunque no se movió de su lugar y ayudó a la chica a levantarse.

Komugi estaba confundida porque la sensación de su salvador no se sentía humana, era como si su piel fuera rasposa y luego de tocar otra partes de su cuerpo, como su pecho y brazos, notó que tenían ligeras modificaciones que no parecían humanas.

Meruem no dijo nada porque era obvio que esta chica era ciega, así que esperó a que terminara para poder hablar.

Luego de ese extraño momento, los dos rápidamente empezaron a conversar sobre sus vidas, y todo terminó con Meruem convirtiéndose en lo que se podría decir, un guardaespaldas fantasma.

Él se mantendría ocultado, protegiendo a Komugi de todo peligro mientras descubría por qué sus instintos le habían gritado que la ayudara, a pesar de que esto era una estupidez, un sin sentido.

"¿Meruem?" - preguntó Komugi mientras miraba en dirección donde estaba su acompañante y guardaespaldas.

"No es nada, solo pensaba en el pasado" - respondió Meruem mientras miraba en dirección de su brazo faltante y apretaba los dientes - "Juro por dios que no volveré a sentirme así de débil, no volveré a sufrir tal humillación"

"Meruem, uno cosecha lo que siembra, si terminaste así, tiene que haber sido por un motivo" - respondió Komugi mientras cerraba los ojos porque en cualquier caso, ella no podía ver y no le gustaba sentir la mirada de la gente sobre sus ojos grises - "No sé sobre tu pasado porque no has querido revelarlo, pero si alguien te persiguió por tanto tiempo, únicamente para dejarte en ese estado, tiene que haber sido por algo, después de todo, el mundo no es blanco y negro"

"Es irónico que hables de colores cuando eres ciega, Komugi" - murmuró Meruem mientras miraba a su protegida.

"Hay cosas que incluso los ciegos podemos ver" - respondió Komugi con una sonrisa - "Cosas que las personas que pueden ver, pasan por alto por estar encandilados por los múltiples colores del mundo"

Meruem no respondió, él se quedó en silencio, digiriendo las palabras de la chica que por su apariencia y actitud, normalmente pensarías que era una tonta, aunque luego de pasar unos cuantos meses junto a ella, comprendió que eso estaba lejos de la realidad.

Komugi era una chica inteligente, una persona que sabía qué decir y cuando hacerlo, también tenía un extraño sentido de la empatía.

"En fin, ¿Dónde iremos ahora?" - preguntó Meruem mientras miraba a la chica.

"Hmm, no tenemos nada que hacer durante la próxima semana, así que quiero que practiques conmigo" - sonrió Komugi mientras se daba media vuelta.

"Solo quieres sentirte bien contigo misma luego de derrotarme" - respondió Meruem con el ceño fruncido porque no importaba cuanto lo intentara, él seguía sin poder derrotar a Komugi en Gungi.

Durante su viaje con la chica, él había intentado cientos de actividades, y en todas había salido ganador contra muchos expertos, pero a pesar de todo esto, él seguía siendo derrotado por su protegida.

"Sabes muy bien que eres el único que puede hacerme mejorar, es por eso que te lo pido" - respondió Komugi con honestidad - "Mientras más fuerte te vuelves, más tengo que mejorar para no ser derrotada por ti"

Meruem chasqueó la lengua antes de aceptar - "Bien, aunque esto lo haré no porque me lo pides, sino porque quiero derrotarte"

"Entonces vas a tener que esforzarte más" - sonrió Komugi mientras los dos empezaban su juego.

Meruem le dio una mirada a la chica antes de decirle su movimiento a su contrincante.

Él había logrado comprender el motivo por el cual sus instintos le habían dicho que salvara a la chica, después de todo, ella era la persona más interesante que había conocido en su vida.

"¿No vas a hacer tu movimiento?" - preguntó Komugi al no escuchar a su rival decir nada por un buen tiempo.

"Oh, lo siento, estaba pensando algunas cosas y no me di cuenta de que ya era mi turno" - respondió Meruem mientras negaba con la cabeza.

"Eres alguien extraño, Meruem, y no lo digo por tu especie" - musitó Komugi mientras hacía su movida.

"No creo que tengas el derecho de llamarme extraño, cuando tú eres demasiado rara para ser una humana" - respondió Meruem con molestia - "Normalmente, te alejarías de alguien como yo cuando descubriste que no era humano, sino de una especie peligrosa"

"Juzgar a alguien por su especie o apariencia, es horrible" - bufó Komugi con molestia - "Uno tiene que juzgar a las personas por sus acciones"

"Entonces menos tendrías que relacionarte conmigo" - murmuró Meruem mientras suspiraba con pesar.

"Ni pienses que te voy a dejar ir" - bufó Komugi nuevamente - "La gente cambia, ¿Por qué tú no podrías hacerlo?"

Meruem se quedó en silencio antes de darle una sonrisa a la chica, solo para reanudar su partida de Gungi.