Capítulo 737: Gran Laberinto Haltina (6)

"Ugh..." - Cloud soltó un agudo gemido de dolor al sentir cómo su cabeza parecía que estaba a punto de explotar - "¿Dónde estoy?"

"¡Cloud ~! ¡Es hora de que te levantes ~!" - exclamó una voz femenina.

Cloud frunció el ceño antes de sacudir la cabeza mientras unas palabras salían inconscientemente de su boca - "¡Ya voy mamá!"

El rubio rápidamente se levantó y caminó hacia la cocina, el lugar donde vio a una mujer de apariencia normal, al menos en comparación con la suya. Ella tenía el cabello negro rizado, una estatura ligeramente inferior al promedio y vestía unas ropas que uno podría encontrar en cualquier tienda.

Lágrimas empezaron a aparecer en los ojos de Cloud al ver esta mujer.

"¿Qué sucede, hijo?" - preguntó la mujer mientras miraba con sorpresa la actitud de su bebé - "¿A caso te golpeaste mientras bajabas?"

"No... estoy bien" - respondió Cloud con una sonrisa - "Es solo que se siente como si hubieran pasado siglos desde la última vez que te vi..."

"Estás exagerando" - dijo la mujer mientras negaba con la cabeza - "En fin, desayuna que tienes que ir a la escuela"

"Ok" - asintió Cloud mientras sentía que algo raro estaba pasando.

"¡Cloud-san!" - exclamó una voz femenina.

"Veo que Shea-chan vino a buscarte de nuevo" - dijo la mujer de cabello negro mientras veía como la puerta se abría, mostrando a una linda chica de cabello plateado y ojos azules - "Hola, Shea-chan"

"Hola, señora Strife" - dijo Shea con una sonrisa.

Cloud se tomó la cabeza cuando escuchó este nombre porque no tenía sentido, su apellido no era Strife, él era...

*Bzz Bzz*

Todo a su alrededor empezó a distorsionarse mientras pensaba en esto, como si él estuviera dentro de una simulación corrupta.

"¿Estás bien, Cloud?" - preguntó Shea mientras miraba al rubio.

"Sí..." - respondió Cloud mientras sacudía la cabeza.

"Es bueno escucharlo, las demás están esperando fuera" - dijo Shea mientras ponía sus manos en su cadera - "En serio, no entiendo cómo es que todos los días te niegas a despertar en las mañanas"

"Es algo que su padre hacía cuando era joven" - respondió la señora Strife mientras negaba con la cabeza.

"¿Padre?" - murmuró Cloud mientras se tomaba la cabeza para aliviar el dolor - "Imposible, esa persona..."

Cloud apretó los dientes mientras veía las escenas del pasado, cómo su padre abusivo lastimaba a su madre, como su padrastro los abandonó y los dejó con una deuda que mató a su madre...

"Cierto..." - murmuró Cloud mientras sus ojos se volvían fríos.

"¿Cloud?" - dijo la señora Strife antes de soltar un grito de sorpresa al ver cómo su hijo parecía haber enloquecido - "¡Hijo!"

"¡Silencio!" - rugió Cloud mientras concentraba su maná en sus manos, invocando si fiel lanza - "¡No tienes el derecho de hablarme con ese rostro!"

La señora Strife se quedó en silencio mientras las lágrimas corrían por sus mejillas.

Un profundo dolor invadió el interior del chico rubio, aunque rápidamente lo ignoró porque sabía que ella no era la mujer que él estaba buscando, la persona por la cual él había iniciado su viaje en esta odisea que había causado que se recuperara de algunos cuantos traumas, después de todo, si no hubiera sido por la influencia de las chicas, o de todo el tiempo que había vivido, él no habría aceptado ser el padre adoptivo de Myu, después de todo, él en un principio odiaba la palabra "padre".

"¡Cloud, deja de actuar tan raro!" - exclamó Shea, aunque su expresión cambió cuando vio cómo el rubio la miraba con neutralidad - ". . ."

"¡Sáquenme de esta ilusión!" - rugió Cloud mientras sentía cómo todo a su alrededor empezaba a brillar con una enorme intensidad.

* * *

Cloud nuevamente abrió los ojos, y notó cómo él estaba en una cueva similar a la del inicio del laberinto. Él rápidamente miró los alrededores, y notó cómo las demás estaban encerradas en unas especies de ataúdes hechos de ámbar.

El joven rubio caminó hacia la prisión de ámbar más cercana, y vio cómo dentro estaba Remia, quién tenía una expresión de tranquilidad.

"¿A caso tengo que liberarlas?" - se preguntó Cloud, aunque rápidamente sacudió la cabeza - "No, esta es posiblemente la última prueba, o al menos la penúltima"

Cloud lentamente caminó hacia el centro y empezó a construir un pequeño campamento para esperar a que las demás despertaran, lo que no sabía es que recién habían llegado a la mitad de la prueba que este laberinto tenía para ofrecer.

* * * * *

"¿Dónde estoy?" - murmuró Shea mientras miraba alrededor y notaba que estaba nuevamente en el mar de árboles.

"¿Qué estás haciendo, Shea?" - preguntó una voz femenina.

"¿Mamá?" - dijo Shea mientras se daba media vuelta y veía a Mona mirándola con sorpresa.

"Por supuesto que soy yo" - bufó Mona mientras ponía sus manos en su cadera - "¿Quién más podría ser?"

"Lo siento, es solo que..." - dijo Shea mientras se tomaba la cabeza - "¿Qué estaba haciendo?"

"Creo que te golpeaste la cabeza, hija" - suspiró Mona mientras negaba con la cabeza - "En serio, no entiendo cómo es que tu esposo te aguanta"

"¿Esposo?" - repitió Shea mientras fruncía el ceño.

"¿A caso te olvidaste de Cloud-san?" - preguntó Mona mientras fruncía el ceño - "En serio, eres cruel con tu esposo, él te ha estado apoyando desde que te rescató de esos salvajes humanos"

"¡Cloud-san!" - exclamó Shea mientras sus ojos brillaban ligeramente, aunque al mismo tiempo sentía que había algo raro - "¿Qué hay de las demás?"

"¿Demás? ¿De qué estás hablando?" - preguntó Mona mientras miraba a su hija.

"Yue-san, Tio, Kaori" - respondió Shea mientras decía los nombres de su amigas.

"No sé de quién estás hablando, Cloud viajó solo hasta que te encontró en problemas y decidió quedarse contigo" - respondió Mona mientras negaba con la cabeza.

"¡Imposible! ¡Cloud nunca abandonaría a las demás!" - exclamó Shea mientras fruncía el ceño. Ella rápidamente corrió a su hogar y vio cómo su padre y los demás miembros de la tribu Haulia estaban arando con sonrisas en sus rostro, aunque lo que le sorprendió, fue ninguno de ellos parecía haber sufrido el entrenamiento sádico de Cloud.

"¿Shea? ¿Qué estás haciendo sola?" - preguntó Kam mientras miraba a su hija - "¿Dónde está tu madre?"

Shea miró a su padre y notó que era él también tenía la apariencia débil de cuando todavía no pasaba por el entrenamiento de Cloud, así que rápidamente conectó los puntos - "Ya veo..."

"¿Qué sucede?" - preguntó Cloud, quien lejos de usar su típico traje de aventurero, estaba usando unos shorts marrones y un abrigo de piel de oso sobre sus hombros, mostrando su firme musculatura llena de marcas tribales, una prueba de que había sido aceptado por la tribu Haulia y Verbergen.

"¡Todo esto está mal!" - exclamó Shea mientras apretaba los puños - "¡Esta es una ilusión, y una muy mala!"

"Shea..." - dijo Cloud mientras intentaba acercarse, solo para ser recibido por una cachetada - "No sé quién eres, pero cometiste un error al usar esa apariencia"

Cloud se quedó en silencio antes de soltar un suspiro.

Shea se preparó para el combate, cuando vio cómo todo a su alrededor empezaba a llenarse de una fuerte luz cegadora.

* * *

"Ugh..." - Shea soltó un gemido de dolor luego de caer al suelo con su rostro.

"Veo que despertaste" - dijo una voz que reconoció de inmediato.

"¡Cloud-san!" - exclamó Shea mientras se paraba, viendo al Cloud que recordaba, con su típica ropa ajustada que marcaba sus músculos y su tono ligeramente frío.

"Honestamente, pensaba que Yue sería la primera en despertar" - dijo Cloud mientras negaba con la cabeza.

"Lo sabía, todo era una ilusión" - murmuró Shea mientras negaba con la cabeza.

"Sí, una que fue creada a través de nuestros más grandes deseos, posiblemente ocultos en lo más profundo de nuestros subconscientes" - respondió Cloud mientras negaba con la cabeza.

"Es extraño, porque eso no era lo que deseaba" - dijo Shea mientras explicaba su sueño.

"Creo que tu inconscientemente deseas monopolizarme, lo cual no es extraño porque es algo natural" - respondió Cloud mientras resaltaba lo obvio - "Eres feliz con tu vida actual, de eso no hay duda, pero inconscientemente deseas que te mire solo a ti, es por eso que esta ilusión se transformó en ese deseo oculto"

"Ya veo" - murmuró Shea mientras asentía - "Eso explicaría algunas cosas..."

Cloud sonrió ligeramente antes de ver cómo Shea se acercaba peligrosamente a él.

"Aunque ahora estamos únicamente nosotros dos, creo que es un buen momento para cumplir este deseo ~" - dijo Shea mientras le daba una mirada apasionada.

Cloud levantó una ceja, aunque una expresión de diversión apareció en su rostro cuando vio cómo la chica conejo soltaba un gemido de irritación cuando escucharon cómo uno de los ataúdes de ámbar se rompía.

"¡Oh, vamos!" - exclamó Shea con molestia mientras veía cómo Yue se levantaba con debilidad - "¿Yue-san?"

Yue miró a Cloud con un ligero rubor en sus mejillas.

El chico rubio levantó una ceja mientras veía cómo Shea corría donde la chica vampiro y le preguntaba sobre lo que había soñado, avergonzando aún más a la pobre chica vampiro.