847: Enfrentamiento (2)

"Esperen un momento, todavía falta un grupo más" - dijo Cloud mientras ignoraba la creciente tensión de las familias que se habían reunido en la habitación.

Shizuku y Kaori estaban observando todo esto en silencio, sin saber qué hacer en esta situación, en especial cuando podían notar cómo la familia de Kouki Amanogawa parecía que iba a explotar en cualquier momento.

La puerta nuevamente fue tocada, y esta vez fue Remia quien la abrió, mostrando a una pareja de unos 30 años. El hombre tenía el cabello morado y un físico bien entrenado, mientras que la mujer tenía el cabello negro y una apariencia hermosa. Ellos eran los padres en este mundo de Rika, así como los cuidadores de Cloud.

El dúo miró detenidamente a la familia Amanogawa con el ceño fruncido antes de concentrar su atención en Cloud, quien parecía tener una expresión complicada en su rostro.

"Lamentamos la demora" - dijo el hombre de cabello morado. Él era Eric Smith, antiguo soldado estadounidense que había venido de vacaciones a Japón y terminó quedándose luego de enamorarse de su esposa y decidir tomar su apellido.

"Lo siento, estábamos un poco... emocionados..." - dijo la mujer. Ella era Mito Minami, la madre de Rika.

"No, yo me disculpo por tan abrupta reunión" - respondió Cloud mientras tomaba un largo respiro y miraba alrededor - "Ok, ahora que estamos todos reunidos, es tiempo de que hablemos, honestamente, les recomiendo que los menores no escuchen esto, no quiero ser el responsable de causarles traumas"

Seiji estaba por decir algo, cuando sintió la mano de su esposa sobre su hombro, lo que le hizo comprender que estaba dejando que sus emociones se salieran de control - "Entiendo, Mitsuki, sal de la habitación"

"¡No, yo quiero escuchar directamente lo que le sucedió a Nii-san!" - exclamó Mitsuki con lágrimas en los ojos, después de todo, era imposible que su amoroso hermano mayor hiciera algo tan cruel como no solo matar a una chica de su grupo, sino también intentar matar al resto de sus compañeros.

"¡Mitsuki!" - rugió Seiji Amanogawa mientras entrecerraba los ojos, pero su hija no parecía querer ceder.

"Creo que es mejor que le dejemos escuchar, Seiji-kun" - suspiró Miya Amanogawa mientras miraba a su esposo.

Seiji frunció el ceño antes de asentir con debilidad.

"Myu, ¿Puedes llevar a los niños a jugar a tu habitación?" - preguntó Cloud mientras veía cómo Myu entraba a la tensa habitación y llamaba a los niños para que le siguieran.

Eric y Mito simplemente miraron a Myu con una ceja levantada, aunque luego hablarían sobre esto.

"Ok, supongo que ahora podemos hablar" - dijo Cloud mientras miraba a la hermana pequeña del chico que le había causado tantos problemas - "Pueden hacer todas sus preguntas, voy a responderla con la mayor honestidad posible"

"¿Mataste a mi hijo?" - preguntó Seiji mientras iba directo al punto.

"Sí" - respondió Cloud mientras ignoraba la hostilidad del hombre Amanogawa - "Y no lo hice por algo tan bueno como por el bien de la gente del otro mundo, no, yo lo hice por venganza"

Un profundo silencio invadió el lugar cuando el rubio dijo estas palabras.

"¿Es cierto todo lo que escuchamos sobre mi hijo?" - preguntó Miya Amanogawa mientras se mordía el labio - "¿Qué él traicionó a sus compañeros y no solo mató a dos chicas, sino que a muchas más personas?"

"Es cierto" - respondió Cloud mientras negaba con la cabeza - "Amanogawa dejó que su obsesión nublara su juicio y fue corrompido lentamente por el poder del dios loco, al final una espada maldita hizo que él matara a cientos de habitantes del otro mundo, y entre las víctimas estaban Eri Nakamura, una chica que se convirtió en una traidora también por su obsesión con Amanogawa, y Rika Minami, mi compañera y segunda líder de los héroes"

Miya empezó a sollozar mientras Seiji apretaba los puños con furia porque aunque no querían admitirlo, todas las pruebas apuntaban a que el rubio decía la verdad. Era imposible que los antiguos compañeros de su hijo mintieran todos a la vez, e incluso si ese fuera el caso, habría ligeros detalles que haría que sus relatos fueran diferentes, pero no importaba cuantas veces ellos preguntaran, todos los alumnos hacían las mismas respuestas o eran similares con algunos pequeños detalles casi negligentes.

"¡Estás mintiendo! ¡Mi hermano mayor nunca haría algo como eso!" - exclamó Mitsuki mientras miraba con odio al rubio - "¡Nos estás engañando! ¡Todos ustedes nos están engañando porque tienen celos de lo bueno que era Kouki!"

"¡Suficiente, Mitsuki!" - exclamó Seiji mientras parecía que estaba a punto de explotar, aunque esto no era más que una respuesta para intentar calmar su corazón. Él quería creer que las palabras de su hija menor eran ciertas, pero mientras más tiempo pasaba, más dolorosa era la verdad.

"Si no me crees, puedo mostrarte prueba física de que lo que digo es cierto" - respondió Cloud con el ceño fruncido - "Solo digo esto porque odio que me llamen mentiroso"

Mitsuki intentó decir algo, pero las palabras se quedaron atoradas en su garganta, esto debido a que ella no quería saber la verdad. Mientras ella siguiera repitiendo esta posible mentira, esta seguiría siendo verdad hasta que la verdad fuera revelada.

Seiji sabía lo que pasaba por la mente de su hija, es por eso que la estaba deteniendo, era mejor que al menos uno de ellos continuara conservando la imagen amable y cariñosa de su hijo, y no el hombre cruel que mató a cientos de personas para cumplir sus deseos.

Cloud guardó la esfera porque podía notar la mirada suplicante de Seiji Amanogawa.

"Mi hija..." - murmuró Taiga mientras apretaba su puño en impotencia porque ella había notado los cambios en su hija, pero no había hecho nada al respecto. Ella se maldecía no haber intervenido antes, y tal vez así podría haber salvado la vida de su bebé, la única familia que le quedaba luego de la muerte de su marido.

"Todo lo que dijeron los chicos es cierto, aunque si le sirve de consuelo, fue gracias a su últimas palabras que los demás héroes lograron salvarse" - respondió Cloud mientras intentaba tener el mayor tacto posible.

Seiji le lanzó una mirada agradecida, aunque el sentimiento de culpa que estaba sintiendo era mayor porque fue su propio hijo el que había causado el fallecimiento de esta chica, lo que le hizo pensar que tal vez debería de haber hecho algo también para poder detener a Kouki.

Normalmente, Seiji era una persona tranquila y cobarde, pero la muerte de su hijo le había hecho cambiar a una actitud más firme, actitud que le había hecho ver los cientos de errores que había cometido durante los primeros años de vida de sus dos hijos, errores que no iba a pensar en cometer por segunda vez.

"Eri Nakamura logró tener su redención en sus últimos momentos..." - finalizó Cloud mientras negaba con la cabeza.

Taiga empezó a llorar más fuerte cuando escuchó esto. Ella estaba feliz de que al menos no sería recordada como una villana, un pequeño consuelo entre todo el dolor que estaba sintiendo por el fallecimiento de su bebé.

"Honestamente, no tendría que haberles llamado a ustedes, pero lo hice porque merecían saber la verdad desde mi perspectiva" - dijo Cloud mientras miraba a las dos familias restantes - "Voy a ir directo al punto, yo maté a sus hijos"

La familia Hiyama y Shimizu se encogieron cuando escucharon estas palabras, aunque no interrumpieron al chico rubio, aunque esto fue por miedo a que él se vengara por las acciones de sus hijos.

"No tienen que preocuparse, no planeo hacerles daño, solo quiero hablarles sobre la verdad de los sucesos que terminaron con la muerte de sus hijos" - respondió Cloud mientras negaba con la cabeza - "Empecemos con Hiyama, él murió por una situación similar a Amanogawa, su obsesión con Kaori y sus celos conmigo, hicieron que me atacara por la espalda y me enviara directo al abismo. Desde cierto punto, le agradezco porque fue gracias a esto que logré convertirme en lo que soy actualmente, así como pude conocer a Yue, es por eso que no solo no les haré daño a pesar de su pésimo trabajo como padres por criar a... una mala persona como Daisuke Hiyama"

La pareja Hiyama agacharon la cabeza cuando escucharon esto porque era un duro golpe para ellos. Sí, ellos no habían sido los mejores padres, aunque esto era porque ellos habían vivido toda su vida en la pobreza, y cuando nació Daisuke, ellos decidieron que tendrían que dar un giro de 180°, es por eso que trabajaran hasta el cansancio, dejando poco tiempo para poder criar a su hijo que creció con todo en el mundo, todo menos el amor firme de sus padres para poder corregir su accionar.

Finalmente, Cloud posó sus ojos en la familiar de Yukitoshi Shimizu y les explicó lo que había sucedido. Ellos simplemente agacharon la cabeza mientras sollozaban porque sabían que la situación no se hubiera salido de control si hubieran estado más atentos a las necesidades de su hijo, a cómo él estaba sufriendo, no solo en la escuela, sino también en casa con el cuidado de sus hermanos.