Capitulo 38: Julius

Mientras nos dirigiamos a la guarnicion de guardias, se me ocurrio la grandiosa idea de pensar que que deberia cocinarle a Felt cuando la vuelva a ver. Tal vez un hamburguesa es mas de su estilo... Tendre que hacer el pan yo mismo, encontrar lechuga, tomate y hacer mayonesa. Un poco de cebolla seria ideal...

Justo cuando estaba pensando como hacer la carne, una dulce voz me interrumpio.

-¿Paso algo, Subaru? Son pocas las veces en las que te he visto tan serio-

-Estaba pensando en que cocinar, lo siento por no escuchar...- Dije mientras volteaba mi cabeza a mi acompañante, la inocente Emilia-nyan.

-*Suspiro* Estaba preguntando sobre tus planes en la capital, ¿Algo que te interese?-

-Hmmm, tal vez comprarle un recuerdo a Betty, Petra y Meili...-Mientras hablaba puse mi mano sobre mi barbilla para hacer el tipico gesto de pensar-Dime, Emilia. ¿Sabes de alguna tienda que les pueda interesar a las tres?-

Pregunte esperanzado a Emilia por algun consejo sobre que comprarle a mis waifus, ella solo nego con la cabeza y dijo.

-Yo creo que cualquier cosa que compres por tu propia eleccion sera del agrado de las tres-

Al escuchar las palabras de la chica de pelo plateado, pense que en verdad Emilia habia dicho algo revolucionario, gracias a esas palabras mi mente se ilumino dandome asi una simple pero gran idea.

-Tal vez si les regalo peluches que muestren cuanto las quiero, ella se pondran felices...-

-¿Dijiste algo, Subaru?-

Ups, estaba pensando en voz alta. Deberia tener mas cuidado, me ha pasado 4 veces en esta semana.

-Lo siento, Emilia. Solo eran divagaciones mias-

Emilia parecio entender, aunque me miraba de reojo curiosa por mis pensamientos. De hecho el brillo en sus ojos me decia que estaba ansiosa por entender mi proceso de pensamiento. Lastima, que nunca podras saberlo, por tu bien y el mio.

-Bueno, es una lastima que Meili y Betty no pudieran acompañarnos. Estoy seguro de que les hubiera gustado caminar por la capital real con nosotros-

-No lo niego, Subaru... Pero creo que a mi me gusta pasar el tiempo a solas contigo...-

-¿Que?-

-¡N-nada!-

Emilia parecia muy nerviosa cuando le pregunte que dijo, supongo que debio decir algo vergonzoso sobre que le gusta pasar tiempo conmigo a solas.

Mientras pensaba en lo complicado que debe ser el pensamiento de una waifu, un recuerdo me vino a la mente, estaba caminando hacia la universidad, estaba caminando de la mano con dos niñas que tienen como maximo 10 años. En ese momento....

(Flashback)

-Nii-san, deberias cocinarnos un pastel de chocolate...-

-No, Nii-san deberia cocinarnos un pastel de fresas...-

Mientras mis dos hermanas peleaban aun sostenian mis manos, lo cual hizo que movieran mis brazos de un lado a otro.

-Rin, Aoi. Por favor no peleen...-

Las dos niñas se dieron la vuelta para mirarme, las dos tenian un puchero en sus caras.

-¡¡¿¿Entonces cual prefieres??!! Pastel de chocolate/fresa, ¿¿Verdad??-

Como su pelea se convirtio en hacerme elegir entre las dos, me pregunto... Ciertamente la mente de las chicas es complicada...

(Fin del Flashback)

Que buenos recuerdos, solo espero que mis queridas hermanas esten bien. Pensando en eso decidi cocinar algo en conmemoracion a esos recuerdos.

-Emilia, ¿Te gustaria comer pastel mas tarde?-

-Claro, Subaru. Pero ¿Por que tan repentino?-

-Solo me dieron ganas...-

Emilia me miro un poco extraña, pero rapidamente lo dejo pasar.

Despues de ese intercambio Emilia y yo caminamos por un rato con una atmosfera comoda, hasta que la chica de pelo plateado se detuvo.

-Aqui estamos-

Ciertamente parece un distrito de clase alta, las casas grandes, las calles limpias y la gran muralla que parecia la entrada a un condominio para millonarios. Nuestro destino era el edificio que servia de puerta, sellando la unica calle que lo conectaba con el mundo exterior.

La solida estructura trabajada en piedra era mucho mas lisa que cualquier otra cosa en el distrito de los nobles, que a la vez se encontraba situado detras de ello. La parte trasera del edificio contactaba con una seccion del muro, permitiendo que alguien que se encontraba en el techo puciera inspeccionar toda la ciudad con un simple vistazo.

Sin embargo, el objetivo de este punto de observacion era vigilar lo que estaba por debajo, no el de disfrutar el paisaje.

-Esta es la guarnicion de los guardias de la capital real. Tambien verifican la identidad de las personas que ingresan al distrito de los nobles-

Solo asenti sabiendo que la persona que aparecera ahora, era mi mayor enemigo de momento. Emilia camino hacia la puerta de la guarnicion, pero justo cuando ella iba a tocar, esta se abrio hacia el exterior mientras un joven asomaba su rostro.

-...Oh, no es frecuente que me encuentre con un conocido en un lugar como este. Ha pasado tiempo, Señorita Emilia. No ha cambiado nada desde entonces-

El joven se inclino formalmente ante Emilia... a quien habia reconocido a pesar de que llevaba puesta la capucha. Este joven hizo que me irritacion subiera a niveles espaciales, estaba luchando para no maldecirlo en este mismo momento... Esto es malo.

-...Si, Gracias. No hay cambios en particular. Veo que tambien gozas de buena salud, Julius-

-Me siento honrado de que me recuerde. Su belleza solo ha aumentado, señortia Emilia-

El joven era Julius Juukulius, la persona que misteriosamente mas me irrita en estos momentos. Por si no sabian su apariencia, tenia pelo violeta, era demasiado formal para que sus palabras parecieran naturales y tenia un poco de cortesia. Era aproximadamente 15 cm mas alto que yo, poniendo su altura alrededor de 1.80cm. Su cuerpo era delgado, pero no parecia debil; mas bien tenia una complexion tanto atractiva como flexible, le daban un grado detestablemente fino.

Como quisiera patear su trasero arrogante en este momento.

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A/N: Chicos logre conseguirme internet para subir el capitulo, bueno tengo poco tiempo asi que les dire gracias por leer.

Se despide.

-KOTOMINE