Capitulo 71: Negociaciones

Anastasia había llegado a la habitación, ella vino con su caballero Julius, el cual miraba a Subaru con emoción de alguna manera perder de esa forma, hizo que el caballero de pelo violeta se emocionara mas.

"La mirada que Julius me esta dando, me pone de los nervios..." Fueron los pensamientos de Subaru, el cual trataba de ignorar la extraña mirada de Julius.

-¿Hay algún asiento que este predeterminado para mi?- Anastasia le preguntó a Crusch con una mirada traviesa, la matriarca de la Casa de Karsten no entendió la broma y negó con la cabeza.

-Puedes sentarte donde quieras, Anastasia-san-Dijo Crusch seriamente, Anastasia suspiró aburrida ya que no pudo bromear con Crusch, ella se sentó en la silla que estaba cerca de donde Subaru estaba parado, y luego apoyó sus codos contra la mesa, mientras sujetaba su mentón con cada mano.

Russell que no quería interrumpir, vio como no hablaban mas, así que decidió que era su turno de presentarse, se arreglo un poco el traje y le dio una reverencia educada a Anastasia, su tono de voz fue totalmente uniforme.

-Es un placer conocerla finalmente, Lady Hoshin. He escuchado mucho de usted, mi nombre es Russell Fellow, soy el tesorero del Gremio de Comerciantes del Reino del Dragón de Lugunica- Dijo Russell el cual se presentó educadamente a Anastasia.

-El placer es mio, Russel-san. Como ya sabrás soy una candidata al trono y ademas soy la dueña de la Compañia Hoshin, mi llamo Anastasia Hoshin-

Subaru escucho todo en silencio, al ver que terminaron las presentaciones levantó la espada un poco, y erigió la barrera que silenciaba el sonido desde adentro.

Y con esa acción se dio inicio a las negociaciones.

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Crusch notó que todos estaban en silencio, así que respiro hondo y habló.

-Bueno, empezare hablando primero. Mi intención al hacer estas negociaciones es que Anastasia-san nos ayude con la cacería de la Ballena Blanca- Terminó Crusch la cual levantó la vista para mirar directamente a los ojos de Anastasia.

-Hmmm, dime... ¿Que gano de esto?...-Luego giro un poco la cabeza para ver a Subaru, y dio una sonrisa misteriosa-... ¿Acaso ocuparas tu favor en esto?-

Esta vez Subaru fue quien respondió, el joven mayordomo negó con la cabeza, mientras hacía eso miro directamente a los ojos de Anastasia, pero esta vez no ocupo su Autoridad, solo miro sus hermosos ojos, antes de sonreír y decir:

-Yo sé que tu nos ayudaras. La gran Anastasia Hoshin, no podría dejar pasar un negocio tan bueno, ademas como recompensa, puedes tener los derechos de extracción de piedras mágicas del Bosque Elior por un año. Tendrás una parte de la recompensa por la cacería y ademas te llevaras la mitad del honor por su muerte, eso junto a los derechos de extracción sin duda son un negocio demasiado bueno para dejarlo pasar, ¿Verdad?...- Dijo Subaru el cual habló sinceramente con Anastasia, el joven mayordomo en ningún segundo quitó la vista de sus ojos.

[Felicidades, has recibido +10 puntos de afecto con la Heroína Anastasia Hoshin]

Continuó Subaru con una sonrisa-... Lo mismo va para Lady Crusch, tendrás derechos de extracción del Gran Bosque Elior y la otra mitad del honor por la muerte de la Ballena Blanca-

Subaru sabía que al ofrecerle este trató a Anastasia, haría que la chica de cabello purpura no pueda ni siquiera pensar en rechazar, por otro lado Crusch esta si o si en esta cacería cortesía de Wilhelm van Astrea. Al ver que las dos candidatas estaban perdidas en sus pensamientos, Subaru le dijo a Russell en voz baja.

-Russell-dono usted también ganara algo, no se preocupe...-Dijo Subaru con un tono de negocios, Russell que fue invitado por Rem, solo cerró un ojo y le dijo de vuelta.

-Me gustaría una copia de esa espada, sé que tu puedes hacer eso así que lo espero con ansias-

Los dos hombres solo pudieron reír maliciosamente al ver como Crusch y Anastasia asintieron con la cabeza, en señal de aceptación del tratado.

-Entonces, llegó el momento de pedirle el favor. Lady Anastasia-Dijo Subaru con una cara preocupada, Anastasia notó su expresión e insto a Subaru a continuar.

Subaru estuvo en silencio un poco mas, ya que en su mente estaba pensando en como decirlo de la mejor forma posible, no quería que sonara suicida y tampoco quería que sonora como una obligación, después de dos segundos mas de pensamiento, Subaru se decidió.

-La verdad, necesito que Sir Julius y otras personas capaces de su ejercito privado me ayuden con algo-

-¿Y ese algo es?-

-Necesito que me ayuden a matar al Arzobispo del Culto de la Bruja, representante de la Pereza. Betelgeuse Romanee-conti...- Dijo Subaru esperando la respuesta de Anastasia.

-Hmmm, lo que dices es un poco difícil. Pero como yo perdí la apuesta, supongo que es mi deber ayudar-

Subaru suspiró aliviado de haber recibido una respuesta positiva de Anastasia, su plan estaba casi completo, solo faltaba un factor. El joven mayordomo miró a Russell y dijo.

-En cuanto a usted, Russell-dono. Tengo un negocio que podría interesarle...-Subaru miró a Ravel la cual pareció entender lo que quiso decir, y se acerco a Subaru antes de sacar algo de su vestido, un pequeño frasco.

-En este frasco se encuentra una medicina capaz, de regenerar heridas y volver a conectar extremidades, inmediatamente después del consumo, Lady Ravel, aquí es hija de una familia noble de mi ciudad natal, se llama Ravel Phoenix. Y la familia Phoenix puede generar esta medicina llamada Lagrimas de Phoenix. Le ofrezco este frasco con las lagrimas, a cambio de que algunos comerciantes del Gremio, nos ayuden evacuando a las personas. También Lord Mathers, pagara por el contenido de los carros. Usted consigue prácticamente una segunda vida y los comerciantes consiguen el dinero por sus mercancías- Subaru terminó de hablar y al instante se trata de conseguir aire, después de que sus pulmones están llenos de aire, habló de nuevo.

-¿Le parece un trato justo?-

Russell miró a Subaru por unos segundos y luego sonrió.

-Me parece bien, coordinare todo para que evacuen a las personas sin ningún contratiempo-

Subaru solo pudo relajar sus hombros al ver que todo salió bien, la verdad Ravel le había contado como se hacían las lagrimas, son tres pasos un poco sencillos la verdad.

1. Entrar dentro de un círculo mágico que fue creado a través de un ritual especial.

2. Dejar caer sus lágrimas dentro de una copa o recipiente especial lleno de agua.

3. Esperar a que las lágrimas se convierta en Lágrimas Fénix.

Si las lagrimas no salieron con la mente en blanco, significa que no podrán convertirse en Lagrimas de Phenex, Subaru solo suspiró mientras hacía una nota mental de darle a Ravel alguna habitación para el proceso.

"Solo esperó que el Payaso no se dé cuenta"