Prólogo: Nubes Negras
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*Susurros*, *Susurros*, *Susurros*
En una gigantesca sala sombría, miles de voces hablaban entre sí en susurros.
Los dueños de las voces tenían todos algo en común.
Todos y cada uno de ellos vestían una larga tunica negra simple sin decoraciones con una capucha que les cubría el rostro dejando solo la boca y la mentón a la vista.
Mientras pasaba el tiempo entre los silenciosos susurros, pronto una puerta gigante frente a todos se abrió lentamente.
tap tap tap tap...((...))
De la puerta, un grupo de personas entraron, sus pasos resonaron por toda la sala.
Todos los susurros se detuvieron y las personas que antes susurraban rapidamente voltearon sus cabezas hacía el origen de los pasos.
Mientras todos miraban al grupo de figuras entrantes, las figuras también encapuchadas finalmente se detuvieron frente a un podio al final del gigantesco salón.
Entonces, la figura que estaba al centro del grupo caminó paso a paso hasta que se posicionó encima del podio.
"..."
Arriba en el podio, la figura levanto lentamente su vista.
Lanzando su mirada por todo el salón, observó en silencio a las miles de personas.
*Tragar* *Tragar* *Tragar*((.....))
Miles de personas tragaron saliba nerviosamente mientras la figura los observaba.
Segundo a segundo, la tensión en el salón aumentaba mientras la sombría atmósfera hacia latir furiosamente el corazón de los más débiles.
Justo cuando la armosfera se estaba por volver insoportable, una voz sin emociones fluyo por todo el salón.
"Hoy finalmente es el día..."
"Hoy, moriremos."
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En un pequeño vecindario.
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27 de noviembre de 2030
6:00 AM
Noviembre estaba por terminar, otoño estaba en su apogeo y hojas secas caían de los árboles con cada soplo de aire, creando un hermoso paisaje en esta mañana fría.
El sol empezó a alzarse desde el este y los adultos se preparon para ir a sus trabajos mientras los jovenes se despertaron para ir a la escuela como de costumbre.
"... Es un nuevo amanecer.... Es un nuevo día...... Es una nueva vidaaaa..... Paraa miiiiii... Y me siento bien.."
"... Me sienntoooo taaan bieeeeen"[1]
La atmosfera en el vecindario que era pacifica y armoniosa hasta hace solo unos segundos... Fue interrumpida repentinamente por unos alaridos.
La voz desentonada pronto empezó a resonar por los alrededores, molestando a los vecinos cercanos.
La molesta melodía venía de una pequeña casa blanca vieja y despintada hecha de ladrillos.
Dentro, una figura se retorcía alrededor del comedor con alegría.
Piak* Piak*(Golpe)
"¡Cierra la maldita boca imbécil!"
Dos golpes pesados sonaron en la pared cerca de la figura bailarina, seguidos por un rugido.
"....."
Kevin, quien bailaba y cantaba alegremente en la cocina, se detuvo en seco.
Un segundo después, sintiéndose ofendido, resopló.
"¡Hmph!"
"La gente de hoy en día no aprecia el buen arte"Pensó.
Ignorando lo sucedido, tomó la comida que acababa de calentar en el microondas, se pavoneó hasta su asiento en la sala y sin más, empezó a devorar su desayuno.
Él no dejaría que este incidente vergonzoso le arruinara el día.
Después de todo, hoy era un gran día.
Ayer, ¡Finalmente logró establecerse en un trabajo después de mucho tiempo!
Pensando en eso, Kevin pronto terminó su desayuno y se dirigió al baño para tomar una ducha...
"...¡Yeah! Perdonen Kame Hame....."[2]
Así, empezó otra serie de alaridos desafinados de nuevo.
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Mientras Kevin destrozaba los tímpanos de los vecinos, naturalmente no se dio cuenta de como el cielo anteriormente claro, lentamente comenzó a volverse extraño.
Las nubes negras empezaron a llenar el cielo junto con un viento silbante.
Swoosh!
Sin que nadie se diera cuenta, todo se oscureció.
"......"
Los alrededores se tornaron silenciosos y una atmósfera inquietante inundó el cielo.
Todo aquél que viera las nubes negras meciéndose en el cielo, le daría la sensacion como si de una danza demoniaca se tratara.
Algunas personas afuera ya podian sentir el sudor frío bajando por sus espaldas, junto con un escalofrío recorriendoles el cuerpo sin ninguna razón aparente.
Antes de que las pocas personas en la calle que ya estaban listas para iniciar su día pudieran preguntarse que era lo que pasaba, las nubes negras comenzaron a moverse de una forma más extraña.
Desde el horizonte, se podia ver como las nubes formaron un anillo gigantesco. Dejando un cielo despejado en el medio.
De hecho, una vista rara.
¡Trueno! ¡Trueno!
Unos minutos después, los rayos también comenzaron a aparecer cerca del anillo de nubes de vez en cuando.
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Mientras todo esto sucedía, Kevin terminó de ducharse.
Tomando una toalla, salió de la regadera y pasó frente al espejo cuando...
"¡¡Que rayos!!"Kevin exclamó en voz baja.
Abriendo mucho los ojos, se detuvo y miró al espejo.
"Q-Qu... Qué sexy!!"Murmuró, tapandose la boca con las dos manos admirando su propio reflejo.
Como todos los días, se quedó perplejo ante su propia belleza.
Parecia no ver su estómago sobresaliente.
"Cada día estoy más rico..."
... Luego de hacer algunas poses tontas, finalmente salió del baño con una sonrisa tonta.
Kevin se puso su ropa de trabajo y cuando estaba apunto de irse...
¡Chillido! ¡Chillido! ¡Chillido!
De repente se escucharon algunos gritos fuera de la casa o mejor dicho... ¡Chillidos que hielan la sangre!
"...?"
Kevin, que estaba a punto de salir, se detuvo e hizo una mueca extraña.
Estaba seguro de que nunca había escuchado a nadie gritar así en toda su vida.
Sorprendido, caminó lentamente hacía una ventana que estaba al lado de la puerta de salida y apartó la cortina oscura que cubria la ventana.
Abrió el espacio justo para su ojo y dio un buen vistazo.
"....!"
Kevin se quedo en blanco un segundo y susurro:
"Santa madre..."
*Trago*
Lo que vio... fue horrible.
Despu��s de un segundo, su cara palideció por completo y su respiración se volvió inestable.
Esa escena quedaría marcada en su alma para siempre... incluso después de la muerte.
*Temblar*
Kevin, quién acababa de echar un vistazo al paisaje afuera, tembló.
Era temprano en la mañana, a esa hora los primeros rayos del sol ya deberían de estar alumbrando todo.
Sin embargo, las nubes negras hacían lucir los alrededores con un tono oscuro. Si eso fuera todo... entonces, eso no sería suficiente para que Kevin casi se cagara en los pantalones.
Lo que lo asustó en verdad, fue lo que estaba sucediendo fuera.
En la calle la gente corría como loca mientras unas siluetas negras los seguían.
Los pobres desafortunados que no eran tan rápidos como para escapar de ellas, eran arañados hasta la muerte.
Kevin incluso pudo ver como muchos cuerpos desgarrados yacían tirados en sus propios charcos de sangre.
"... ¡J-Joder!"
Soltando una maldición silenciosa, Kevin corrió a la cocina, agarró el cuchillo más grande que pudo encontrar y regresó tembloroso a la ventana.
"...Uf"
Aunque con miedo, quería saber que rayos pasaba fuera.
Preparándose mentalmente, reunió todo su coraje y abrió la cortina una vez más.
Kevin no pudo evitar temblar otra vez mientras miraba los cadáveres en el suelo y las siluetas que aún correteaban a unas pocas personas de aquí para allá.
Después de observar durante unos segundos....
"¿Eh?"
Él involuntariamente levantó su vista al cielo.
"¿¡Que carajos!?"Arriba, un anillo gigantesco de nubes se podia ver en el lejano horizonte con incontables puntos negros saliendo volando desde dentro del anillo hacia todas partes, pareciendo no tener fin.
"No puede ser..."
Kevin se empapó por completo en sudor frío, todo era como una maldita pesadilla.
Mientras miraba el cielo, notó como esos puntos se dirigían hacia todos lados, algunos de ellos, incluso estaban viniendo en dirección hacia el vecindario.
Viendo esto, Kevin no pudo evitar pensar en los cuerpos desgarrados en la calle.
Pensando en todos los riesgos que esos puntos podian implicar, rápidamente corrió a apagar todas las luces de la casa como un rayo.
Por suerte, la casa era pequeña y solo tuvo que apagar las luces de un par de cuartos.
Habiendo apagado todo, se aseguró de que las ventanas y puertas estuvieran bien cerradas, luego, se dirigió a un rincón y se acurrucó en silencio.
"¡¡Ayudaaaaa!!"
"¡¡Ahhhhhhhhhhhh...!!"
Afuera, los gritos se hacían cada vez más fuertes y continuos.
"¡¡Alejaaaaaateee!!"
Kevin inclinó su cabeza.
Sus manos estaban frías y sostenía el cuchillo de cocina con tanta fuerza que las yemas de sus dedos pronto volvieron blancas.
Tenía tanto miedo que sentía que el tiempo pasaba muy lentamente.
Luego de una larga tortura mental y sin saber cuanto tiempo habia pasado, los gritos poco a poco disminuyeron y finalmente cesaron.
Y Kevin quien estaba en un rincón, levantó la cabeza con desconcierto.
Después de dudar por un rato, Kevin torció su trasero y gateó hasta la ventana.
Luego de apartar cuidadosamente la cortina, dio un vistazo.
La escena afuera era simplemente espantosa.
Había muchos más cuerpos que antes.
Lo que era peor, las siluetas se habían detenido para comer de los cadáveres.
Parece que las personas a las que seguian las siluetas antes ya estaban bien muertas.
"...."Kevin silenciosamente miró las siluetas... Parecían una especie de perros pero sin pelo, con piel grisásea y al menos dos veces mas grandes.
Tenían una cabeza redonda y fea, ojos como largas grietas, sin orejas, hocicos muy grandes que cuando los abrían para comer parecían como si sus cabezas se partieran por la mitad, largas colas gruesas y extremidades largas junto con tres garras afiladas en sus patas, en sus espaldas, habian dos alas de murciélago.
Mientras los observaba, los monstruos deformes se deleitaban de los cadáveres.
Viendo esto, Kevin de repente pudo reconocer uno de los cadaveres que estaban siendo devorados.
"Bastard...!!"Antes de que Kevin pudiera maldecir, su cara se congeló y se agachó lo más rápido posible.
La cara de Kevin palideció por completo.
Él podría jurar que el maldito monstruo que se estaba desayunando a su vecina... había girado la cabeza en su dirección!!
"No, no no no no... No es posible, no..."
Tenía la cabeza hecha un desastre, le aterrorizó la sola idea de que el monstruo lo haya podido ver.
Asustado, cerró los ojos y puso sus manos cubriendoce la boca, haciendo todo lo posible por no respirar.
Thump!* Thump!* Thump!* Thump!* Thump!* Thump!...* [3]
En la pequeña casa silenciosa, lo único que Kevin podía escuchar era el sonido atronador de su corazón, él casi lloraba por haber nacido con un corazón tan ruidoso.
Pronto pasó un minuto y la cara de Kevin ya se estaba poniendo azul, él aún no había respirado por temor de atraer la atención de la bestia.
Sin embargo, pronto pensó que si se resistía más, podría hacer un ruido aún mayor cuando se quedara sin aire eventualmente.
Así que sin más remedio...
"..Haaah..."Lentamente apartó sus manos y empezó a respirar lo más suave que pudo.
Así pasó otro minuto y no ocurrió nada.
"...Uf, a salvo"
Kevin suspiro aliviado en su mente, sabia que si el monstruo lo hubiera notado, no estaría tan tranquilo como ahora.
Cansado de tantas emociones constantes, regresó cuidadosamente a su rincón.
No haría ningún ruido, ni se movería nunca más.
Había aprendido su lección. Esperaría hasta que la Policía viniera a salvarlo.
*Ondular* *Ondular*
Fue una lastima... el mundo no giraría en reversa solo porque él así lo quisiera.
Poco después de que se sentará a esperar la ayuda que nunca vendría, el espacio enfrente de él comenzó a ondular.
Sobresaltado, Kevin parpadeó un par de veces y se frotó los ojos.
Luego, con una expresión extraña, pensó mientras miraba el espacio vacío delante: "De hecho, algo raro está pasando.."
"...!!?"
Mientras miraba el espacio vacío en frente, su cara cambió de nuevo, una puerta hecha de energía negra había aparecido donde había ocurrido la ondulación, junto con una garra que estaba por salir de ella.
Kevin reconoció la garra, se parecía a la de los monstruos que estaban fuera.
"No puede ser..."
La desesperación llenó su corazón, sabía que los cielos lo habían a abandonado.
No había manera de que una vez que esa cosa saliera de la puerta, el débil él se mantuviera con vida.
Incluso si él de alguna manera pudiera derrotarlo, los monstruos fuera de su casa seguro lo notarán debido al ruido.
"¡¡Mierda!!"
Kevin apretó los dientes hasta que rechinaron.
Desesperado y sin más opciones, tomó la decisión más loca que pudo pensar y cargó hacía la puerta empuñando su cuchillo de cocina por delante valientemente...
"¡¡Muere!!"Rugió en su corazón.
Al segundo siguiente, Kevin atravesó la puerta y desapareció de la sala junto con la garra.
La casa quedó en silencio, como si nada hubiera pasado.
Simplemente así, una persona y un cuchillo de cocina desaparecieron de este mundo.
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En una gran roca, en un lugar desconocido...
El espacio comenzó a ondular cuando de repente apareció una puerta y dos sombras salieron volando de ella antes de caer pesadamente en la roca.
Una sombra estaba ensangrentada casi hecha pedazos y permaneció sin moverse.
Mientras que la otra, solo parecía estar dormida.
Por supuesto, quien parecía dormido, era Kevin, mientras que el tipo ensangrentado, era el monstruo que solo había podido sacar su garra antes.
Kevin se había desmayado en el momento en que entró al portal debido a que lo atacó un fuerte mareo.
Si hubiera estado despierto, se hubiera dado cuenta que el pobre bastardo ensangrentado a su lado, murió por su culpa.
Cuando Kevin entró en el portal se desmayó pero eso no pudo evitar que él apuñalara al monstruo aturdido delante de él, empujándolo todo el camino de regresó.
Cada segundo que Kevin pasó dentro, apareció una nueva herida en el cuerpo del monstruo. Por suerte para Kevin, estuvo detrás del monstruo todo el tiempo y gracias a eso no resultó herido en ningún momento.
El tiempo voló y Kevin y el cuerpo del montruo siguieron tirados sin moverse en la gran roca...
Después de una cantidad desconocida de tiempo, Kevin finalmente empezó a despertar.
"Ugh... ¿Qué pasó?"Murmuró, aún estando un poco aturdido por los mareos.
Unos segundos después, frotándose la cabeza con disgusto, se sentó.
"........!!?"Su mente, que estaba aclarandose un poco, quedó en blanco una vez más cuando miró los alrededores.
"Yo...¿Dónde estoy?"
Frente a Kevin, habían arbustos y malas hierbas por todos lados, lo extraño era que los arbustos y hierbas eran de color totalmente negro y median más de un metro de altura.
Mientras que atrás de él había un bosque con árboles de tamaño que iban desde cuatro metros hasta más de veinte metros.
Todos y cada uno de ellos totalmente negros, mientras que todo el suelo era una tierra roja oscura que la hacia parecer sangre seca.
El paisaje daba bastante miedo...
Swoosh!
¡Un viento frío sopló!
Kevin sintió sudor frío por toda su espalda.
*Tragar*
Tragando saliva con gran dificultad, levantó lentamente su cabeza...
Anteriormente, mirar los alrededores ya lo había asustado lo suficiente como para que su corazón latiera furiosamente.
Sin embargo... eso no era nada comparado con lo que sintió cuando miro el cielo.
".........!!?"
La cara de Kevin era tan blanca como el papel.
La desesperación inundo su cuerpo e incluso pareció que su corazón había dejado de latir por un segundo.
...Arriba en el cielo, no era el cielo familiar al que él estaba acostumbrado.
El cielo era gris y más sorprendente aún, habían cientos de esferas rojas casi tan cerca que pensarías que estaban por caerte encima, además, había nueve soles visibles por todo lo ancho del cielo.
Kevin estaba aturdido, pronto una débil suposición surgió en su cabeza la cual pronto tomó fuerza...
"Arrgghh....Ahhhh.....¿Porqué!? ¿Porqué a mí!?.....Wooouuu....¿Porqué?..."Kevin lentamente cayó al suelo y lloró desconsolado.
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"Wuu..No debería de haber entrado a esa maldita puerta.....¿¡Eh!?"
Kevin ya llevaba unos pocos minutos lamentándose cuando finalmente vio el cadáver que estaba cerca de él.
Lo reconoció al instante. Era un monstruo como los que vio fuera de su casa, pero éste no tenía alas.
Sorprendidó, recordó como había corrido valientemente hacía la garra que salió de la puerta antes.
Un poco sospechoso, rodeó el cadáver buscando algo.
Pronto encontró lo que buscaba, cerca del pecho casi desgarrado del monstruo, había un cuchillo de cocina clavado firmemente.
"...Esto... Es él?... Si, ¡¡no hay error!! ¡Todo esto es tu culpa! ¡Maldito infeliz!!.... ¡Muere! ¡Muere! ¡Muere!"Kevin se abalanzó hacía el cadáver en un ataque de furia.
Usó todo el conocimiento de lucha que aprendió en la televisión y golpeó brutalmente al cadáver mientras lloraba.
Lo golpeó tanto que probablemente ni los propios padres del monstruo lo reconocerían más.
Mientras lo golpeaba, recordó como esos monstruos se comían los cadáveres de sus vecinos.
"Así que... ¿Te gusta comer cadáveres, bastardo enfermo? Nunca pensaste que las tornas se voltearian ehehehee..."Estiró su mano hacía el pecho destrozado del cadáver y...
*Arrancar*
Agarró un montón de carne babosa y se lo metió a la boca.
"¡Horrible!" Tan pronto como se metió la carne a la boca, quizo vomitarla, pero finalmente pudo resistir y masticar.
"Haré que este monstruo bastardo se arrepienta de comer humanos.".
Sin saber que éste monstruo aún no había comido nada ya que apenas habia entrando por la puerta cuando murió, Kevin se comió la carne lentamente.
Ñum~ *Tragar* Ñum~ Ñum~ *Tragar* Ñum~ Ñum~ *Tragar...*
...Después de comer con éxito ese gran bocado de carne Kevin entró en si y se quedó parado viendo al infinito, con una expresión aturdida.
Luego, mucho tiempo después...
Swoosh!
Un viento pasó por su cuerpo frío nuevamente, despertándolo de su aturdimiento.
Movió lentamente la cabeza y vio el gran cielo arriba.
"...."
"HahAHaHaHAhaHa...!"
No pudo evitar soltar una carcajada pensando en todo lo ridículo que acaba de pasar.
Con la sangre del monstruo aún en sus dientes que lo hacia parecer muy brutal pronto sus ojos se llenaron de locura y deseo de muerte.
Se había vuelto loco.
Había pasado tanto miedo por que no quería morir antes pero ahora que estaba en esta situación hubiera preferido morirse.
"Pensándolo bien, estaría mejor muerto y sin preocupaciones que toda esta mierda, sí..."
"Es solo la muerte... ¿¡QUÉ HAY QUÉ TEMER!?"
Luego de decir eso, volvio a reír.
"HahAHaHaHAhaHa...!"
Dándose la vuelta, bajó de la gran roca y se dirigió lentamente hacia el bosque de arboles negros.
Alejándose cada vez más y más...
Pronto, solo se pudo ver el contorno de su silueta desapareciendo lentamente en el bosque.
Poco a poco, Kevin se mezcló con la atmósfera sombría y lúgubre del bosque, desapareciendo por completo.
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BOOM! BOOM! BOOM! BOOOM!!
En un gigantesco planeta completamente rojo que estaba rodeado por cientos de planetas más, se podían escuchar explosiones atronadoras por todo el lugar haciendo que todos los seres vivos temblarán de miedo.
Una gran batalla estaba teniendo lugar en el planeta, más bien, una masacre.
Allí, había un anciano feo, el viejo tenia una expresión rara, un poco traviesa y rara. Cualquiera diría que le patinaba el coco.
El tipo era tan viejo que solo le quedaban unos pocos cabellos en su cabeza.
Casi parecía un saco de huesos.
Tenía manchas negras por todo su cuerpo e incluso un olor a descomposición había empezado a brotar de su cuerpo.
Parecía como si estuviera en su último respiro.
Si no fuera porque...
"Hihihihi~"
Swoosh! Swoosh! Swoosh!
"¡¡Ahhhhhhhh!!"
"¡¡ROOARRRGGHH!!"
Cada paso que el anciano feo y loco daba lo hacía desaparecer y aparecer en distintas partes del campo de batalla!!
En cada lugar por el que él apareciera, el espacio temblaría y sonarían rugidos miserables.
...Cuando desaparecía nuevamente, lo único que quedaba eran sangre, huesos y los secos de su risita picara.
"....."
"....."
"...."
Lejos, un grupo de siluetas borrosas estaban viendo el campo de batalla.
"¡Hmph! Ese viejo pedo, esta en las puertas de la muerte pero aún se atreve a ser tan arrogante!"Una voz joven sonó de una de las siluetas.
"Tranquilo joven maestro, pronto se quedará sin energía y lo mataran de tod....! ¡¡¡CUIDADO!!! ¡¡¡SE DETON--" Una voz vieja estaba contestado a la joven cuando de repente la voz vieja gritó de miedo.
¡¡KAA-BRROOOOOOMM!!
Lastimosamente, antes de que pudiera advertir a los demás, una explosión sin igual a las anteriores se escuchó por todo el planeta.
Al segundo siguiente....
El planeta explotó en pedazos!!
La explosión se extendió aún más lejos del planeta gigante y pasó por los muchos planetas más pequeños, antes de detenerse.
"...."
Pronto, el espacio se calmó otra vez.
De los cientos de planetas que habían en un principio, un tercio junto con el planeta gigante, habían desaparecido.
Solo un suspiro se escuchó en el inmenso espacio...
"............¿Qué hay que temer?....hihihi~"
El suspiro solo duro un tiempo antes de desaparecer también...
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Pensamientos del autor, a numa:
[3]Intente imitar el sonido de un corazón, asi que aquí "Thump" lo uso como "pálpito o palpitar".
[1] La cancion se llama; Feeling good y en esta versión quién la canta es Michael Buble aquí tienes el link:
https://youtu.be/Ehm4HLnr-FQ
[2]La cancion se llama El rap de DragonBall Z y la canta Porta:
https://youtu.be/ovKHg9mDf84