Se escucharon rugidos provenientes de un almacén abandonado, la tierra temblaba y el viento enloquecía alrededor del lugar.
Pequeñas chispas que se hacían cada vez más grandes destellaban en el aire, haciéndolo ver cada vez más peligroso y a la vez majestuoso.
Un gran estallido junto con un gran rayo que descendía del cielo fue lo único que pudo hacer que todo terminase en un silencio que reinó por varias horas.
La puerta del gran almacén se abrió y se pudo ver a un chico rubio con ojos dorados salir por la única salida-entrada que había.
Era Takeo, aunque estaba un poco sonriente.
POV: Takeo
Le dolía todo el cuerpo, su corazón no dejaba de latir por la adrenalina que poco a poco se iba yendo, dejándole darse cuenta de que se había sobrepasado un poco en la pelea de práctica.
Pero prácticamente, cada vez que luchaba, tenía que dar todo o si no recibiría un castigo de parte de AFO, el castigo de ser un perdedor.
Los apenas 10 meses que había pasado bajo la tutela de AFO solo le hicieron realmente pensar si seguir haciéndolo, pero con el temor de ser asesinado junto con su familia, le dieron fuerzas inexistentes para resistir a todo.
Primero fueron ejercicios y prácticas de quirk para acondicionar un poco sus cuerpos a los primeros meses, pero luego... fue una completa tortura.
Se le exigía cada vez más al pasar del tiempo. A los 5 meses de ir al lugar de entrenamiento, tuve que tener peleas constantes con Reyki. Ese loco suicida hablaba en serio con apostar todo siempre y cuando pueda. Muchas veces salí perdedor por sus tácticas, me desconcertaron al principio, pero luego fui acostumbrándome, al punto de ganarle las últimas 8 veces seguidas.
Él se reía al verme siendo golpeado por AFO al ser el perdedor, pero ahora él está siendo maltratado, y eso, no me da ni una gota de lastima. Que se joda.
Ah, cierto, mi personalidad últimamente ha ido cambiando mucho por las circunstancias en las cuales me metí y con la mala influencia de Reyki.
No he tenido mucho tiempo al entrenar y trabajar, así que he faltado muchas veces a clases para recuperarme o por cosas del trabajo. Mis notas habían bajado (no tanto por la ayuda de Yamato) y mis faltas no hacían más que seguir acumulándose, pero aun sigo estudiando cuando puedo.
Reyki por muy extraño que suene, me dio una rara advertencia en cuanto a a cercarme a Bakugo, diciéndome que lo único que necesitaba yo era el sufrir más. No entendí al principio pero igualmente el poco tiempo y lo lleno de cosas que estaba por el momento, no me le acerqué en ningún momento.
Como dejé la banda, he ido de trabajo a trabajo todo el tiempo, así que el mantener un trabajo como el que tenía ahora con buena paga era raro, y lo quería mantener a toda costa.
Mi vida sigue siendo un desastre, pero me las arreglo con lo que puedo. Pero el sueño de ir a UA está cada vez más cerca.
Pero últimamente he estado sintiendo que se acercaba algo muy peligroso, algo de lo cuál tenía que protegerme adecuadamente o podría morir.
Antes podía decirme a mi mismo que era solo un poco paranoico, y el miedo y nerviosismo hacia la UA no me ayudaban. Pero la punzadas que tengo me dejaban un mal presentimiento ante algo desconocido.
Y ahora un dolor de cabeza intensamente grande.
O también puede ser que me desmayé...
Oh mierda, es cierto, en 3 días ya es el examen de la UA!
La emoción vibraría dentro de mi si no fuera porque no siento nada actualmente.
.
.
.
Para esos 3 días, AFO nos pidió a Reyki y a mi que no viniéramos, que nos centráramos en estudiar y recuperarnos para la prueba. También nos dio palabras de aliento, no pude creer lo que salía de su ¿boca?
Reyki vivía en un área muy peligrosa, había pandillas y mafias metidas como ratas en sus madrigueras alrededor de su casa. Habían disputas y peleas todo el tiempo.
La razón por la cuál él aún seguía viviendo en ese lugar era porque el único trabajo que tenía era en una tienda, le pagaban bastante por ahuyentar a las molestas moscas que de vez en cuando querían ir a robarles. Y él disfrutaba bastante el golpearlos.
Y luego de esa información, aquí estamos, frente a la gran y hermosa puerta, llena de aura del heroísmo.
"Oye, idiota, tienes una cara de pervertido muy asquerosa, cámbiala" Reyki como todo un idiota me dio esas palabras.
No podía negar que no tenía una expresión normal en mi cara, pero pervertida?
Solo estaba emocionado, aunque mi trabajo no era del todo honorable, iba a disfrutarlo, quería ser algún día lo suficientemente poderoso para enfrentarme a AFO.
O tal vez a All Might.
Dejando de lado mis pensamientos, miré hacia un lado y lo primero que vi fue a Izuku charlando con una chica. Raro. Lo último que recuerdo era ver a Izuku muy pero muy nervioso cuando hablaba con alguien extraño.
¿Pero parece que está coqueteando?
¿Ok?
Alejando mi línea de visión hacia otro punto, vi a Bakugo, traté de acercarme pero el agarre en mi hombro de Reyki me detuvo
Aun sigo sin entender el porque quiere que me aleje de ella, pero cuando le pregunto me dice que no podría soportarlo y que simplemente me olvidara de ella.
No se si hacerlo, pero poco a poco siento que es lo mejor para mi. Después de todo, no tengo ni la oportunidad, verdad?
.
Después de los exámenes y la conferencia, en la cuál sucedieron cosas raras (fui el único en gritar y realmente me sentí muy avergonzado), ahora estaba preparándose seriamente en la entrada de la prueba practica. Había visto a Izuku y al tipo de lentes hablar por un momento, pero luego los perdí de vista por la multitud de estudiantes.
Reyki al parecer fue asignado a otra área por lo cuál no se cruzaran. Pero con lo poderoso que es seguro que entrará.
AFO nos recomendó que hiciéramos todo lo que sea posible por entrar en la clase 1-A. Por lo cuál no me detendré ni por un momento de destruir robots para obtener los puntos necesarios.
Las puertas parecen empezar a abrirse y veo a algunos nerviosos, otros entusiasmados y otra vez vuelvo a ver a Izuku. Lo último que recuerdo de él era que no tenía ningún Quirk, no era atlético y no sabía luchar.
Me preocupa un poco, ya nos explicaron cuales serían nuestros objetivos. Si él sería capaz de hacerles siquiera un rasguño me sorprendería.
Algunas veces me pregunto el porque cambió tanto. El porque de su cambio de personalidad, de su manera de ser.
.
Un grito de Present Mic hizo que volviera a poner atención hacia lo que tenía delante.
Cada poco que se abrían las puertas, se sentía extraño, una corriente fría recorría por su espalda. Algo se quebró y empezó a tener dolores de cabeza. Escuchó murmullos pequeños que se iban haciendo más y más fuertes.
Un temor se escabulló en sus pensamientos. El miedo de no ser suficiente, de ser solo un desperdicio. De seguir siendo ese chico de fondo, el juguete de toda la clase. De fallar en la prueba y perder la única oportunidad que tendría en toda su vida.
De ser un perdedor.
Las palabras que más le dolieron empezaron a reproducirse por toda su mente. Se quedó plantado en medio del camino mientras más y más personas iban hacia las puertas.
Los empujones no se hicieron esperar y por poco cae sobre sus rodillas por lo inestable que estaba.
Inconsciente o conscientemente, puso su mano en su frente y poco a poco fue pulseando una energía extraña dentro de su cabeza.
Luego de unos segundos más, miró a la puerta y rápidamente se apresuró a ir por puntos.
Nuevamente había sellado cierta parte de sus memorias.
La ignorancia hace la felicidad, cuando vives dentro de tu propio mundo sin ver lo que realmente ocurre a tu alrededor.
Takeo era tan débil que no podía aguantar todo lo que pasaba en su vida.
Takeo era tan fuerte y a la vez tan débil que armó su propio mundo, lleno de fragmentos que estaban a punto de derrumbarse.
El pequeño niño aun vivía sufriendo dentro de él. Ese pequeño niño aun reparaba ese mundo que se caía a pedazos.
El pequeño Takeo aun quería seguir vivendo feliz, aunque su propia felicidad sea fabricada por sus propias mentiras y engaños.