Así comenzó todo

Era un día soleado las calles emanaban alegría, y así comenzó todo Mía, una chica joven alegre de 18años de cabello negro azabache, media 1.57 cm y de contextura normal ; estaba preparándose en la academia dispuesta a cumplir sus sueños cueste lo que cueste aspiraba ingresar a la universidad pues el año pasado había acabado sus estudios secundarios , nunca pensó que el destino le jugaría un cambio. Ella no creía en el amor pues había amado mucho a su madre Cristina una mujer que había muerto tan joven a la edad de 32 años para Mía, ese día se acabó el amor, cuando ella partió de este mundo dejandolos a sus hermanos Andres , Sandra y a ella tan solo tenía 9 años ese mismo año en agosto cumpliría 10 años.

Para Mía el mundo se le acabó el día que su madre falleció, pues no tenía una buena relación con su padre Clau, el era un hombre egoísta que pensaba en sus propios sentimientos y había traicionado a su madre, al año de su muerte su padre se casó con Irene una mujer egoísta y narcisista que solo le daba importancia al dinero, a ella solo le importaba su hijo de su esposo anterior nunca le importo los hijos de Clau . Pasó el tiempo y Mía decide irse a vivir a la casa de su tía Feli una mujer muy amable aunque con un carácter fuerte pero de buenos sentimientos, ella educó a Mía hasta terminar la secundaria pero tenía que irse del país su hijo Roberto que estaba en el extranjero lo había llamado y le pidió que viniera a conocer a su prometida con quien iba a casarse. Mía se sentía sola en esa casa así que como su padre Clau también estaba de viaje después que terminó con Irene por que se dio cuenta que ella no era buena con sus tres hijos que había tenido con su difunta esposa así que se separaron ya había pasado 8 años y Mía tenía 18 años.

Ella estaba en la preparatoria, su hermana mayor ya había ingresado a la universidad a estudiar enfermería, ella admiraba a su hermana era tan decidida y fuerte, era el mejor ejemplo que tenía a su lado, así que Mía ponía todo de su parte para ingresar a la universidad y estudiar para ser docente de niños que era lo que más le gustaba. Ella recordaba cada vez que se desanimaba la promesa que le hizo a su madre en la tumba que iba a ser profesional que ningún hombre la trataría mal o la humillaria como hicieron con su madre tanto que sufrió violencia doméstica, por eso Mía odiaba a su padre había visto como su padre maltrató a su madre, ella nunca quería pasar por lo mismo aunque los recuerdos siempre venían a su memoria y le daba pesadillas, no podía descansar bien. Su tía Feli cuando vio todo esto llevó a sus hermanos y a ella a un psicólogo para que la tratarán y pueda ella sacar lo que tenia en su corazón guardado. La vida de los niños que un día fueron felices ahora era un completo desastre su padre se había buscado una y otra mujer después que terminó con Irene no les prestaba atención a los niños, la psicologa lo único que podía hacer es que ellos aprendan a controlar sus emociones y así superar la violencia doméstica que habían vivido. con el amor y dedicación de su tía Feli pudieron superar y allí estaban queriendo comenzar desde el principio.

Mía comenzó a asistir a una iglesia donde conoció a su primer amor un joven de 19 años, tez trigueña, alto y con una mirada tan hermosa, que la cautivaba llevándola a las nubes su nombre era Josep, no asistía a su iglesia solo venía de visita y fue así como se conocieron, ese día como olvidar fue amor a primera vista, ella suspiraba con solo verlo. La iglesia donde participaba había organizado una convensión donde todas las iglesias se reunirian para llevar plenarias, Mía convenció a su hermana para que se vayan y fueron con su buena amiga Lichi, ella sabía de los sentimientos de Mía pero no podía delatarle ante su hermana así que guardo el secreto.

El primer día en la plenaria fueron temprano pues se habían hospedado en un lugar cerca a la carpa de la iglesia rodeado por campo, Mía y Lichi estaban allí bien atentas una vez que terminó la plenaria era mediodía así que salieron con destino a ir a almorzar pero se encontraron con Josep y su amigo Miguel , ella se puso nerviosa no sabia que decir se quedó muda, mientras que Lichi les saludaba , Josep les dijo si querían caminar un rato observando en dirección a Mía , ella no alzó la mirada solo los siguió al momento que estaban caminando sus manos robaron las miradas de muchas personas que les veían extrañados pues conocían a Mía que no era una chica fácil de enamorar pero allí estaba caminando cerca a Josep, solo se despertó cuando sus manos rosaron y ella sintió como una electricidad por todo el cuerpo, no sabía que clase de sentimiento estaba naciendo dentro de ella.

Luego de unos días se termino la convención, Mía regreso a su casa seguía pensando en los momentos bellos que paso, eran varios encuentros fortuitos con el hombre que ella estaba enamorada pasaron meses.

Después Mía ingresa a la universidad y Josep se alegro y felicito a Mía le dijo Mía sé muy feliz y logra tus sueños, ella al escuchas sus palabras quedo encantada pero disimulaba su emoción.

Mía asentó la cabeza y dijo gracias

Esa escena era tan romántica se quedaron en silencio pero las miradas decían muchas cosas.

Ella comenzó a asistir a la universidad y Josep la invitaba a salir y la recogía de la universidad, la emoción embargaba su corazón.

Mía yo quieres ser mi novia le dijo Josep una noche que estaban juntos. Ella se quedó estupefacta no lo podía creer pero a la vez lo veía muy pronto pues sabía que su familia no lo aceptaría por muchas razones pretenciones sociales.

Mía que te pasa porque no me respondes le dijo Josep.

Ella solo le miraba con la calidez de sus lindos ojos. Respondió por ahora no puedo aceptarte me podrás esperar, él se sorprendió pensó que los sentimientos de ambos era mutuo, así que asentó la cabeza si.

Mía se sentía feliz pero no sabía ahora como lidiar con su familia especialmente con sus abuelos que la habían querido como una hija, era tan difícil todo se decía así misma.

Paso un año las cosas se comenzaron a complicar para Mía, la universidad demandaba muchos gastos. comenzó a trabajar y estudiar decidió aceptar a Josep en secreto ante su familia él seguía siendo su amigo.

En la universidad ella tenía una mejor amiga Meri. siempre estaban juntas todo se contaban no había secretos entre ellas.

Meri sabía la relación de Mía y Josep pero guardaba el secreto porque vio en él un hombre bueno, respetuoso que amaba a su amiga.

Mia, porque no dices a Josep que te ayude en tus gastos cuando termines la carrera le devolveras fueron las palabras de Meri.

Mía se quedó pensando no quería que Josep pensara que ella estaba con él solo para que lo apoyara así que no le dijo, pero fue él quien se lo propuso un día que salieron que cualquier cosa que necesitará le pidiera. Ella solo asentó la cabeza.

Josep parecía un buen hombre ella iba a su casa se la pasaban conversando y los padres de él la querían.

Se sentía tan cómoda y feliz, Mía se sentía como en casa.

Pasaron cuatro años y Josep comenzó a cambiar Mía no tejía mucho tiempo para verlo pues trabajaba y estudiaba la relación comenzó a deteriorarse.

Mía se sentía triste, se entero que el andaba con otra mujer y salían.

Josep se termino has tu vida le dijo Mía, él ni se afecto ya esta bien y se fue.

Paso unos meses y se enteró que Josep estaba delicado de salud fue a visitarlo solo como amigos al verlo tan delicado fue varias veces a visitarlo luego se despidió cuando lo vio mejor y nunca más fue, ya no quería nada que ver con su primer amor.

Mía quería seguir su vida pero cuando Josep salió del hospital comenzó a buscarla para que volvieran pero ella ya no quería nada con él.

Mía aún no olvidaba a Josep y se sentía extraña cuando estaba a su lado ya no quería verlo pero él la buscaba, así que ella accedió y seguían viéndose y saliendo.

josep le dijo que se fueran de viaje a la ciudad T y regresarían al día siguiente ella estaba emocionada nunca había viajado con él llegaron en la noche fueron a un hotel y se quedaron a dormir juntos, esa noche fue mágica ella se entregó a él formaron un solo cuerpo aunque le dolía todo el cuerpo pero el seguía poseendola como que se fuera a desvanecer y así se la pasaron toda la noche durmieron pocas horas.

Mía se levantó un poco avergonzada se fue al baño y se baño.

Josep no le dijo nada se levantó y se baño luego de cambiarse le dijo vamos a tomar desayuno y se fueron juntos.