Pareja de socios

Joseph –La pareja de socios más exitosa y mejor combinada

Josué –Como debe de ser –compartiendo mirada cómplice con Ish. –

Hannah – ¡Oh! Cierto, vi las fotos hasta en las redes sociales; hermoso vestido

Lucio –No sabía que irían a una fiesta

Ish –Ni siquiera nosotros lo sabíamos

Hannah – ¿¡No!?

Ish – No, tuvimos que ingeniárnoslas allá; bueno ir de compras

Lucio incrédulo pregunta – ¿juntos?

Ish con tono seco y determinante responde – si

Josué pregunta con un tono seco y agresivo – ¿por?

Lucio –No, solo preguntaba… ir de compras con una mujer –haciendo gesto de rechazo. –

Josué –Créeme ir con Ishtar, es lo más relajado que hay

Ish – ¡claro! Por eso, yo no voy con chicas; jajaja

Hannah con reclamo le dice – ¡Que mala! Cierto, nunca he ido de compras contigo

Ish –Eso de andar tienda tras tienda, probándote todas las prendas y todo tipo de cosas y así, no, no es lo mío

Andrés con el ceño fruncido y curiosidad pregunta – ¿entonces?

Ish –Sí veo algo que me guste, en alguna tienda lo compro. O de acuerdo al evento o la ropa que tengo, veo lo que me falta o visualizo lo que quiero; y solo paso por las tiendas preguntando, por una prenda determinada, en existencia, algo específico

Andrés pregunta incrédulo y burlón – ¿Ósea que solo recorres la plaza en minutos, limitándose a preguntar por algo?

Josué –Básicamente así lo hizo; fuimos solo a tres tiendas, pregunto por algo específico, lo encontró y listo

Joseph – ¡Wow! ¿Y siempre sabes que es lo que quieres?

Ish –Si, o por lo menos el color; además no visito todas las tiendas, solo las que me gustan

Josué –Si, las de marca y más caras –sueltan todos una sonora carcajada con ello. –

Hannah – ¡Claro! Ese vestido no debió haber salido nada barato

Ish – ¡calla! Y los zapatos –dice mordiendo su labio y levantando el pie para mostrar las lujosas y altas zapatillas grises, que combinan con su look, una falda gris, y blusa rosa platinada. Los chicos solo pasaron saliva al ver su desenfadado movimiento, que lucio su pierna.

Hannah, con gesto de asombro poniendo sus manos en la cara exclama – ¡están bellísimos!

Ish con una enorme sonrisa de satisfacción– ¡Sí!

Mientras Pedro, Lucio y Joseph ponen los ojos en blanco, y ríen ahora ellos.

Andrés –Pero tu camisa Josué, también iba combinada con el vestido de Ishtar, o ¿fue casualidad?

Josué –No; íbamos a ir juntos, lo elegante era que fuéramos combinados.

Ish –Como pareja es lo adecuado, de acuerdo a las reglas de etiqueta –Los demas se quedan callados, incómodos, los observan, por lo que acaba de decir Ish, cuando ella reacciona, sonrojándose. – me refiero a pareja profesional, socios, compañeros, en el evento.

Josué con molestia dice –No sean… claro que entendieron

Hannah –hablando de eso… ¿tu esposa se enteró?

Josué –Si –restándole importancia. –

Hannah – ¿Y? –intentando sacarle la información. –

Josué –Pues nada, todo está bien, ahora

Hannah – ¡Aja!

Lucio – ¿Y a ti Ish?

Ish – Todo bien –con fingida sonrisa. –

Pedro – ¿enserio?

Ish, mira fulminante a Pedro. – Si, todo bien; le conté y ya

Pedro – Que bien.

Lucio –Muy comprensible ¿no?

Ish sonríe con autosuficiencia y dice –Así es

Hannah, exclama con ilusión –Una hermosa pareja

Joseph burlón dice –En una de esas, termina incluido en el club, para la noche de copas

Lucio con molestia dice – quien sabe… tal vez, Ish no lo deja

Pedro –No, Ish no tendría inconveniente ¿verdad? –negando Ish con la cabeza. – pero Josué…

Josué –No, yo no tengo inconveniente, no hablaremos de trabajo así que no habría limitante; solo dudo que él tenga interés en esto, o que pueda encajar con nosotros

Andrés con ingenuidad pregunta – ¿Por qué no?

Pedro, le justifica –Es que, es muy…

Ish, modifica la expresión de Pedro – exigente

Pero Pedro concluye – engreído

Hannah, insiste –No pierden nada con invitarlo, le hará bien distraerse

Andrés, aun con un poco de ingenuidad, les cuenta –No he notado que sea… así

Josué, resuelve – Si ustedes quieren invitarlo, adelante

Joseph –Yo no lo conozco

Pedro, ofrece su idea –Podemos invitarlo una noche y pues… si todo va bien, lo seguimos invitando

Joseph –Será raro que de la nada se le invite, ¿no?

Lucio, interesado en la idea, le hecha la bolita a Andrés –Eso le toca a Andrés, que vive en su casa

Andrés – ¿yo? –con preocupación. – bien

Joseph –Me retiro, tengo trabajo –levantándose le da un apretón al hombro de Hannah y se va. –

Ish –Bueno, me voy a seguir con el trabajo

Hannah –Antes les informo que el famoso baile en el que lucen tan bien; como se divulgo el nombre de la firma, están comenzando a contactarnos algunas compañías importantes

Josué –Excelente –dice animado. –

Hannah –más o menos, están pidiendo citas, para prospectarnos; pero hasta el siguiente mes.

Ish –Es un comienzo –sonríe. – ese era el propósito

Pedro –Nos están evaluando, es como un aviso para presionar.

Josué –Pues, a echarle ganas

Ish –Esto es una constante prueba; es lo que hacemos día con día, así que si mantenemos el ritmo y lo nuestro, estaremos bien.

Hannah –Bueno, les he dado la noticia; me retiro chicos, ¿nos vamos juntas al rato Ish?

Ish –Amm… si –se va Hannah. – Bueno si no hay más

Pedro –Si, ¿ya hablaste con la Sra. Guadarrama?

Ish –Si, necesito hablar sobre ello contigo; te veo en tu oficina en un momento

Pedro –Bien.

Andrés – ¿Necesitas algo de mí?

Ish, voltea a ver a Andrés, analizando su pregunta– ehm… no, descuida –estaba por irse, pero el dejar así a Andrés no estaría bien, más si toma en cuenta que él le ayudo a Pedro; regresándose le dice a Andrés– bueno en realidad sí, te veo en la oficina de Pedro en 15 minutos –se va. –

Pedro –Bueno, con permiso la jefa ha hablado

Andrés –Te sigo

Josué –Obedientes, como debe ser; jajá

Lucio, con su cizaña, hecha leña al fuego – En realidad parece que es ella, quien da las órdenes

Josué, le resta importancia – Y se le da bien

Lucio – ¿y tú?

Josué – ¿yo? –frunce el ceño como no entendiendo su pregunta. –

Lucio –Tú eres el director, deberías ser el que mandé ¿no?

Josué, aspira hondo y con paciencia le dice –No hay mando, solo líderes y eso lo compartimos Ishtar y yo; mientras esto funcione. Pero prefiero no desgastarme con los auxiliares, ni dando órdenes; eso lo hacen bien Hannah e Ishtar; y yo ahorro energía negociando o atendiendo a los clientes.

Lucio –entiendo –no muy satisfecho por la respuesta. –

Josué – No sé si ya te había dicho, pero te harás cargo personalmente de una de las compañías más importantes que tenemos.

Lucio, sorprendido, pregunta – ¿En verdad?

Josué –sí, es una constructora, Ishtar es quien tiene el contacto y control directo con la compañía; pero… –No sabe cómo abordar el tema sin exponer el conflicto de Ishtar, quien le pidió fuera secreto. –

Lucio – ¿pero?

Josué –Ishtar estará ocupada con el grupo Mert, y esta compañía, necesita atención personal

Lucio – ¿Es una constructora muy grande?

Josué le explica –No, no mucho. No es por eso, que es importante para nosotros

Lucio, sin entender el motivo, pregunta – ¿entonces?

Josué – Es una compañía, que nos ha dado muy buena fama, nos ha apoyado, con muy buenos contactos y hay un aprecio por la misma, ya que fue nuestro primer inyector de economía, cuando estábamos ya constituidos como firma, ISHMAR

Lucio – ¿Cómo? ¿Fue su primer cliente?

Josué –No como tal, pero el primero que pago desde el inicio; inyecto el dinero, para que esto comenzara a funcionar

Lucio –Muy bien. Y entonces ¿porque no la atiendes tú?

Josué, alza una ceja, acercándose a Lucio, lo mira serio, con la mirada fija en él– Yo soy el director. Ishtar no puede estar yendo a la CDMX; hará de puente para que el Ingeniero Vega, no se sienta abandonado; pero todo lo que se necesite serás tú el encargado de trabajarlo.

Lucio, con susceptibilidad dice – Como auxiliar

Josué –No. Ponte de acuerdo con ella, para que te presente con el Ingeniero. Probablemente, debas ir a conocerlo la próxima semana

Lucio –Está bien. ¿Ella sabe que yo atenderé esa constructora?

Josué – mmm –intenta recordar. – creo, sino… tú le informaras

Lucio, con resignación dice –Está bien

Josué, analítico le cuestiona – ¿Te incomoda trabajar con ella?

Lucio –no –niega con la cabeza, aunque su expresión corporal y nervios dice lo contrario. –

Josué, le pregunta como amigo, en tono comprensivo – ¿tienes algún problema con ella o aun es atracción?

Lucio, sonrojándose, se queda mudo, por un momento– no

Josué –cualquier cosa se puede resolver, pero debo saberlo. Y si aún te gusta, pues lo siento amigo; te has tardado, no se ha casado pero su relación, va en serio.

Lucio –No, para nada es eso. Me voy –salen los dos del comedor hacia sus oficinas. –