Dentro del país del Horizonte Lejano, en la frontera con el país Del Sol, se encuentra la
Ciudad Temple Mental y en la estación de transporte, dos jóvenes salieron desde un portal
de teletransportación.
-¡Wow!, así que así es como se ve una estación bien administrada.
5 portales, de los cuales salían personas constantemente, oficiales en cada portal con
uniforme blanco con patrones dorados y un escudo de un sol saliendo de entre nubes y
montañas bordados sobre sus brazos izquierdos.
-Muéstrenme sus identificaciones por favor.
Justo en este momento, un oficial con cara de póker, se acerco a Judith y Deivid y pidió sus
identificaciones.
-Buenas tardes, mi nombre es Judith y soy la hija de los protectores Clay y Margot del salón
de los patriotas en el país del sol, esta es mi identificación.
Judith dio un paso adelante y mostro una proyección orográfica de su identificación que
era proyectada por su anillo.
El guardia cambio un poco su expresión al escuchar los nombres de los padres de Judith a
la de una de respeto, pero aun así, reviso la identificación para confirmar que todo estaba
correcto.
-Me disculpo si la incomode señorita Solsticio, pero solo es procedimiento.
Solsticio fue el apellido de Judit heredado por sus padres.
-No hay problema.
Justo cuando Judith termino de hablar, el oficial le dirigió una mirada a Deivid el cual no
había hablado hasta el momento.
Al ver esto, Judith volvió a hablar.
-Mi amigo perdió su dispositivo de almacenamiento antes de venir aquí por lo que no
podrá pedir su identificación por el momento, sin embargo la profesora Daniela Xiaofei de
la escuela militar ya esta tratando su problema.
-¡Judith!
Justo en este momento, una mujer que parecía tener 25 años salió corriendo y abrazo a a
Judith.
-¡Daniela!
Judith abrazo también a la mujer que se lanzo a ella con toda su fuerza mientras unas
pequeñas gotas aparecían en sus ojos.
-Ya esta bien, estoy aquí, escuche tu mensaje y vine corriendo de inmediato, descuida hare
que los responsables de la muerte de tus padres lo paguen caro.
Mientras la mujer decía eso sin soltar a Judith, sobo cariñosamente su espalda, dándole
consuelo y comodidad.
-Hee…?
-Ah! ¡Perdón!, Daniela este es mi amigo Deivid, quien me salvo la vida y me ayudo a venir
aquí a salvo.
Escuchando a Deivid, Judith se separo del abrazo de Daniela con un ligero rubor n su rostro
mientras presentaba a Deivid.
-Mucho gusto, es un placer conocer-.
Mientras Deivid se presentaba, por fin logro ver la apariencia de Daniela.
Una mujer madura con rasgos delicados pero una mirada penetrante con ojos azules y
labios rosa, una nariz pequeña y pelo rubio un poco esponjado, siguiendo hacia abajo podía
ver unos pechos mas grandes que el promedio y una cintura de reloj, con unas piernas
largas pero blancas y hermosas.
-Hola.
Daniela al ver que el chico quedo atontado al vislumbrar su apariencia, hasta que no pudo
terminar su saludo. frunció un poco el ceño, pero aun así respondió el saludo.
Escuchando el saludo insípido de Daniela, Deivid supo que el era el que se había
equivocado, con su poco tacto, pero aun así no dijo nada mas y se quedo viendo los ojos de
la mujer frente a el.
Viendo el ambiente un poco incomodo, el oficial intervino, con un tono mas respetuoso y
un saludo formal militar del puño derecho en el pecho, de un soldado a un superior.
-Saludos, profesora Xiaofei.
-mmm, me hare cargo de ahora en adelante, puedes seguir con tu servicio.
Daniela asintió con la cabeza y le dio una orden al oficial antes de que este ultimo se fuera
a seguir con su deber.
-Por supuesto profesora.
-Gracias por salvar la vida de Judith, si hay algo que quieras, no dudes en decirlo.
Viendo que Daniela trataba de una manera un poco fría a Deivid, Judith hablo para tratar
de mejorar las cosas.
-Hermana, Deivid me ayudo bastante antes, pero el no tiene un dispositivo de
almacenamiento propio, podrías ayudarlo por favor.
-Esta bien, vamos al departamento del gobierno y resolvámoslo, ¿pero antes, ya comiste?
-No, aun no hemos comido.
-Bien, vamos que esta hermanara te invitara el mejor platillo de la ciudad.
Viendo el trato cariñoso de Daniela para Judith, Deivid no pudo evitar suspirar para sus
adentros.
"aiss, realmente la regué al principio, pero no importa, siempre hay mas tiempo para
arreglarlo"
-Bien, de ahora en adelante te quedaras conmigo y no tendrás que preocuparte por nada,
mientras vivas conmigo te prometo que te protegeré.
-De hecho, pienso entrar a la escuela militar junto a Deivid.
-¿¡Que!?
Daniela no pudo evitar exclamar cuando escucho a Judith decir esas palabras.
-Si, así es… ese es otro favor que también quería pedirte.
-Judith, si es por la venganza de tus padres, no debes preocuparte, te dije que yo me
encargaría, además, no sabes que tan peligroso puede ser el enemigo.
-Lo se, pero aun así quiero entrar y hacerme mas fuerte.
Viendo que la joven seguía siendo terca, Daniela no tuvo mas remedio que darle un golpe
de la realidad.
-¡No!, no puedes, eso sin contar que no puedes cultivar, incluso si pudieras, el enemigo
esta vez será todo el país Del Sol, por lo que no podrías hacer nada.
-¡Hermana, yo ya puedo cultivar!
-Que?
-Deivid me ayudo y curo, por lo que ahora puedo cultivar.
Daniela tomo rápidamente la muñeca de Judith e inyecto un poco de su energía antes de
soltarla y exclamar.
-¡Es cierto! ¡Ahora puedes cultivar, incluso tienes una energía increíble dentro de ti!
-Te lo dije jejeje.
-Tu…
Daniela sin saber que mas decir, le dirigió una mirada curiosa y penetrante a Deivid.
-Que fue lo que le hiciste?
-¡Hermana!
-Solo la cure y limpie las impurezas de su cuerpo, ella tenia los canales de energía cerrados
por lo que cuando los limpie, la circulación de energía fue posible y con ello el poder
cultivar.
Por supuesto Deivid pudo responderle porque esto fue lo que le dijo Sisi que dijera.
Escuchando a Deivid decir que limpio sus canales de energía, creyó plenamente que Judith
estaba curada ahora ya que ella también sabia sobre eso, pero no pudo creer que existiera
alguien que pudiera hacerlo.
Cabe recalcar que tanto Daniela como los padres de Judith, buscaron alrededor de muchas
ciudades y países con el fin de encontrar una solución a su problema sin poder tener éxito.
Teniendo sus dudas en mente, Daniela hasta pensó que la joven frente a ella no era Judith
por lo que tomo una decisión al instante.
-Vamos, iremos por la identificación de Deivid primero.
Los tomo de la mano a ambos y los saco de la sala de portales.
Cuando salieron de la sala fueron recibidos por una escena increíble.
Personas iban y venían por todos lados unas pocas de ellas iban montadas en bestias de
diferentes formas, como leones, rinocerontes, tigres, lobos, había otras bestias las cuales
tenían formas muy diferentes de los animales que Deivid conocía.
Hubo uno en particular que llamo su atención ya que era similar a la forma de un
hipopótamo con la cara plana sin el hocico normal y todo su cuerpo hecho de piedra.
Otro que era similar a un Alce pero en vez de pelo tenia escamas rojas por todo su cuerpo y
sus cuernos eran de un color rojo brillante como si fuera metal calentado a altas
temperaturas.
Había todo tipo de especies nuevas que Deivid no conocía y quería ver.
"Ahora esto se siente como otro mundo, totalmente diferente"
Deivid no pudo terminar de apreciar la ciudad frente a el, porque su atención fu dirigida
hacia Daniela quien dijo un cantico mientras sacaba una piedra de color verde y esta se
fragmentaba con un destello verde, después de lo cual el destello se transformo en un ave
similar a un águila de 10 metros de altura.
-Pero qué?
Viendo como un animal tan grande aparecía de una piedra tan pequeña, Deivid no supo
como explicar la vista frente a el.
-Llévanos al departamento de registro y se un poco rápido.
-Como hiciste eso?
Daniela quien no parecía haber escuchado la pregunta, salto en la espalda del águila aun
agarrando de las manos a Deivid y Judith como si estos dos parecieran tener el peso de una
pluma y los diez metros de altura fueran solo 10 centímetros.
-El águila al sentir que su amo ya estaba sobre ella. Alzo las alas y de un aleteo se elevo al
cielo con una velocidad sorprendente.
-Ahhhh!