Capítulo 06
*Ruptura. La energía respiratoria estalló en una explosión en cadena a través de las venas espirituales. Pronto se generó un ciclo que provocaba una expansión y condensación continua haciendo que la energía respiratoria se refinara a una alta pureza.
Camino místico Mortal etapa pináculo. Bai Yingzu podía sentir la alta concentración de energía en todo su cuerpo, cargando a cada una de sus células. Se sentía tan poderoso, como si fuera capaz de mover montañas con una sola mano. Bai Yingzu sabía que este solo era un sentimiento, realmente no podría mover montañas con sus propias manos.
Aunque sabía que esto solo era una sensación, y que su verdadero poder estaba lejos de hacerlo posible. En la actualidad su fuerza solo estaba ligeramente por encima del promedio humano, y también había obtenido un leve incremento en la agudeza de sus sentidos.
Sabía que aún estaba lejos de sus verdaderos objetivos, por lo que no se sintió complaciente y continuó con su dedicación en el cultivo.
...
Mientras tanto el tercer anciano se había reunido con el gran anciano mayor.
Al llegar a la sala de reunión el tercer anciano solo había tomado asiento después del gran anciano mayor.
Sirviendo una taza de té para el tercer anciano, el gran anciano mayor habló. "Bai Lie se que te preguntas la razón por la que te he llamado. La respuesta es simple, quiero hablarte sobre Ying Long".
Al escuchar que se trataba de Ying Long, el abuelo de Bai Yingzu, Bai Lie se mostró interesado y escuchó atentamente.
"Ying Long ha enviado una transmisión de voz con una
Al escuchar esto Bai Lie se sintió de muy buen humor por las buenas noticias. Suspirando con tranquilidad sintió como si un gran peso se levantara de sí mismo.
Bai Lie no sabía exactamente que tan poderoso era el abuelo de Bai Yingzu, pero lo que si sabía era que se trataba de uno de los pocos grandes expertos en el mundo. Sin duda los métodos de un gran experto no serían simples, con su ayuda había esperanza en encontrar una solución para el problema de Bai Yingzu.
Poco después se echó a reír tras pensar en lo arrepentidos que estarían los ancianos del clan Yezi si supieran acerca de la gran oportunidad que se les había ido de las manos, o más exactamente habían dejado ir.
El gran anciano mayor pudo darse cuenta de que Bai Lie pareció relajarse al escuchar la buena noticia. Y pareciendo entender lo que estaba pensando Bai Lie solo sonrió ligeramente.
"Bai Lie haz hecho un buen trabajo, estoy seguro que Ying Long sabrá reconocerlo". Tratando de cambiar de tema dijo. "Además tenemos que prepararnos para el banquete de compromiso con el clan Yezi. Eres tú quien tendrá que preparar la bienvenida para los invitados".
Bai Lie se calmó y escuchó con atención las nuevas indicaciones del gran anciano mayor. "Cumpliré con sus expectativas gran anciano mayor, no permitiré que nuestro clan Bai se vea avergonzado". Dijo con un rostro solemne.
El gran anciano mayor estaba satisfecho con la respuesta de Bai Lie. Después de hablar por algún tiempo explicando los detalles para el banquete, el gran anciano mayor despidió al tercer anciano.
...
En la silenciosa sala de reunión solo había quedado el gran anciano mayor. Con un suspiro pareció recordar los momentos de su juventud, exactamente el día en el que conoció a Ying Long.
En aquel momento el clan Bai aún no se había fundado, y en toda la región del sur continental solo había un único clan poseedor del preciado linaje elemental de la tierra. Y este era el prestigioso clan elemental Di, poseedor de una antigua herencia entregada por el mismísimo elemental de la tierra.
Antes de llamarse Bai Yonger, el gran anciano mayor respondía por el nombre de Di Yonger, uno de los famosos grandes genios de su generación. Alcanzando el camino místico de la energía con tan solo 50 años, el camino místico terrenal a los 100 años, y el camino místico espiritual a los 140 años.
Dio la casualidad de que cuando Di Yonger alcanzó el pináculo del camino místico espiritual, se abrió la cueva en ruinas del
Durante una importante reunión las potencias del continente acordaron ceder esta oportunidad a la generación más joven. Para el exterior esto demostraba la magnanimidad de estas grandes fuerzas para sus jóvenes. Pero internamente solo aquellos viejos monstruos sabían que esta ocasión se había usado como un pretexto para apostar, con el fin de demostar cuál era el legado más fuerte, y así obtener cada una de las reliquias considerablemente importantes de los respectivos poderes como premio final.
Como una regla que limitara a ciertas personas se tomó en cuenta que solo aquellos con una edad por debajo de los 200 años cumplían con las suficientes calificaciones para entrar en la competencia. Solo unos pocos jóvenes pensaron que sus mayores habían hecho esto de forma premeditada con el fin de dar un impulso a los jóvenes genios, y que solo aquellos destinados tendrían las mejores oportunidades.
Los conocedores solo optaron por tomar silencio y no despertar a aquellos ingenuos de su burbuja de ilusión. Para cada una de estas fuerzas tomar esta regla fue significativa, eso fue equivalente a aceptar entrar en la competencia con ambos brazos abolidos. Esto es así porque para todos estos poderes sus verdaderos genios que harían al mundo temblar se encontraban en un rango de edad de 210 a los 265 años.
Que ingenuos eran aquellos pequeños al pensar que sus mayores estaban tratando de promover la competitividad entre cada una de las fuerzas de una manera justa, para demostrar cual de los legados era el más fuerte.
En lo que respecta a la mayoría de los poderes, ellos hubiesen optado por dejar entrar a los verdaderos genios para ganar la valiosas reliquias de cada fuerza.
Pero lo que ninguna de las fuerzas hubiera imaginado era que esta pequeña ocasión usada para jugar sería la una oportunidad para aquellos cultivadores demoníacos para infligir heridas al continente de cultivadores ortodoxos.
Este fatídico suceso se grabaría en los annales de la historia en el mundo como la «Guerra de la región central y Masacre de la ruina 5 elementos», precursora de la disputa eterna entre el continente de cultivadores ortodoxos (Continente central) y el continente de cultivadores demoníacos (Continente extremo).
Un suceso que les haría perder a más de las tres cuartas partes de sus jóvenes genios dentro de las ruinas y cerca de la mitad de sus verdaderos genios de fuera de las ruinas quienes originalmente solo esperarían a sus jóvenes para llevarlos de regreso.
Esto llevó a cada una de las fuerzas a lamentarse incluso hasta los tiempos actuales, este odio fue tallado en verdadero jade inmortal que difícilmente podría olvidarse.
Inesperadamente los cultivadores demoníacos habían logrado infiltrarse dentro del continente central por medios desconocidos, llevando a un gran ejército junto a poderosos cultivadores para provocar disturbios y masacres en la región central del continente.
Al ser una región de suma importancia para todos los diferentes poderes influyentes del continente, optaron por enviar sus tropas a la batalla para suprimir rápidamente el caótico lugar, sin embargo, los diversos poderes habían calculado mal.
Los cultivadores demoníacos actuaron como verdaderos lunáticos y crearon un sangriento campo de batalla, por cada cultivador demoníaco perecían dos o tres cultivadores ortodoxos.
Esto fue así porque antes de que cada cultivador demoníaco muriera optaba por autoinmolarse haciendo estallar sus núcleos de cultivo, pequeños mundos y espíritus condensados, generando una gran explosión que acababa no solo con las vidas de sus enemigos sino que también terminaba afectando a sus propios aliados.
Estos cultivadores habían interferido para hacer desangrar a todas y cada una de las grandes fuerzas del continente. Tal suceso había encendido la chispa de rivalidad entre facciones, habiendo llegado a tal punto en el que ambos poderes tanto del camino recto como del camino demoníaco aprovecharían hasta la mínima oportunidad para dar un duro golpe y finalmente erradicar a sus enemigos.
En aquel momento Di Yonger se había encontrado rodeado por varios cultivadores demoníacos de las antiguas sectas «Luna sangrienta», «Mar de sangre profundo», y «Refinación de cadáveres». Estas eran sectas integradas por miembros cuyas mentes eran extremadamente retorcidas.
Estos Demonios masacraron y abusaron de todos los cultivadores del continente central que encontraron, Di Yonger quien no podía soportar tales actos entro en batalla por la defensa de los cultivadores compañeros del mismo continente, acabó con la vida de varios discípulos demoníacos de cada una de estas sectas.
Aquella masacre solo duró por un breve tiempo ya que pronto los ancianos de las sectas demoníacas habían llegado para rescatar a sus miembros de secta, viéndose rodeado Di Yonger apenas pudo resistir contra cuatro ancianos que poseían un pequeño reino más alto que él. Cuando tenía la idea de autoinmolarse para llevarse consigo a todos los enemigos que pudiera, un joven de su misma edad llegó en su ayuda. Con su llegada todos los enemigos murieron y se lograron rescatar a una gran cantidad de cultivadores aliados.
Después de relajarse por un tiempo finalmente ambos pudieron presentarse formalmente. Se trataba de Ying Long un miembro de los misteriosos clanes antiguos. Ambos lucharon lado a lado hasta la finalización de esa breve pero letal guerra, aquello duró solo cuatro meses. Este tiempo fue más que suficiente para que ambos llegaran a considerarse como amigos.
Al finalizar la guerra muchas fuerzas se vieron extremadamente debilitadas, e incluso algunas otras desaparecieron de la noche a la mañana. El clan Di había sido una de estas fuerzas debilitadas, la breve guerra no solo acabó con gran parte de sus poderosos miembros y recursos de cultivo, sino que también se provocó una fractura en la relaciones internas del clan Di. Bai Yonger al ser contemporáneo a esa época, sumando a que tenia cierto contacto con el jeje principal del clan Di pudo conocer ciertos secretos. Algunos miembros importantes del clan Di se había coludido con algunas sectas demonicas para aprovechar el caos y sacar beneficios propios, el fin era derrocar al jefe de clan y tomar control total de uno de los clanes elementales más antiguos del continente central.
Tras una guerra interna que duró aproximadamente un mes el clan elemental Di pudo conservar su autonomía, pero el daño ya estaba hecho, con tal suceso los lazos de confianza y los cimientos del clan tambalearon. Con la muerte del jefe de clan perteneciente a la rama principal del clan, la misma rama principal se opuso a la ascensión del nuevo jefe escogido de las ramas secundarias, viéndose debilitados estos no aceptaron la elección del nuevo jefe de clan ya que habían visto sus intereses afectados.
Con las ramas del clan en desacuerdo se efectuó una competencia para escoger al nuevo jefe de clan, ante sus altas probabilidades de pérdida los miembros de la rama principal hicieron uso de descarados medios para tomar ventajas y resultar ganadores. Como se esperaba, se hizo el caos ya que era más que obvio los sucios métodos de la rama secundaria.
El problema escaló a tal punto de que una parte de la rama secundaria, en su mayoría genios establecidos clamó por abandonar el clan y llevarse consigo a sus familias, lamentable este era una minoría, el resto había optado por someterse a la rama principal.
Di Yonger junto con otros genios de la rama secundaria siguieron al exlíder del clan escogido desde el principio, llevando a sus familias y amigos marcharon para abandonar el clan, su salida no fue pacífica, hubo lucha y muerte de por medio, pero finalmente lograron salir de aquel lamentable clan en decadencia. Algunos miembros de la rama principal sintiéndose avergonzados por las descaradas acciones de sus superiores también optaron por seguir a los miembros de la rama secundaria y ayudaron en su salida. Fue gracias al sacrificio de miembros de la rama principal como de la secundaria que el grupo logró ejercer cierta presión.
Los líderes de la rama principal no pudieron retener por más tiempo a los miembros desertores, entonces no tuvieron más opción que dejarlos ir para mantener todavía un mínimo poder de combate en caso de que otros clanes vecinos quisieran conspirar para aprovecharse de su extrema situación de debilidad. Finalmente el grupo de miembros que quisieron abandonar al clan pudieron hacerlo libremente, algunos otros miembros de la rama secundaria decidieron permanecer quietos debido a la incertidumbre de lo que les depararía el futuro. Aquellos que se fueron no pudieron hacer nada para convencerlos, solo podían desearles los mejor.
Y de esa manera cerca del 20% de la población total del clan Di desertó abandonando así el vasto territorio, liberándose así de la opresión de los líderes de la rama principal con ansias de poder y control este grupo se desplazó hasta llegar a la región inferior del Sur haciéndose vecinos de una pequeña ciudad cercana, llamada ciudad Wuwei. Para empezar un nuevo futuro con esperanza y oportunidades reemplazaron sus nombres optando por llamarse clan Bai.
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