El Genio de Menadion (Parte 1)

—Gracias al Grimorio, esas lecciones únicas que recibimos en el pasado ahora son un registro permanente sobre cómo distorsionar el espacio, actualizar matrices mientras se mantienen activas, y mucho más. Hay mucho que solo podemos aprender de los Ojos, mientras que podemos preguntarle a la Abuela o a Faluel sobre la Maestría de Forja —dijo Lith.

—Exactamente lo que pienso —Solus asintió—. Solo recuerda recuperar tu armadura cuando la necesites y que estás usando ropa normal.

—¡Oh, m-mierda! —Lith dijo, notando que ni la baba ni las manchas de orina de Elysia se habían limpiado solas—. Gracias por el aviso. Iré a buscar uno de mis prototipos.

—Gracias, chicos —Kamila les dio un abrazo a ambos, arrastrando a Lith y Solus a un abrazo familiar—. Gracias por actuar como si todo fuera normal. Gracias por ser tontos y hacerme olvidar mis problemas.

—Sobre todo, gracias por nunca usar ese enlace mental tuyo y mantenerme al tanto. No creo que hubiera podido soportarlo.