Shelly aún fue a tramitar los procedimientos de admisión para que Zoe fuera hospitalizada para que pudieran cuidar al feto. Después de completar todo, Shelly estaba lista para irse con Benjamín y Bella.
En última instancia, eso era todo lo que podía hacer por Zoe. De ninguna manera se quedaría en el hospital para cuidar a Zoe.
—Shelly —Zoe la llamó de repente.
—¿Hay algo más? —Shelly se volteó para mirar a Zoe.
—¿Puedes llamar a Nox por mí? —preguntó Zoe.
Zoe era completamente diferente de la mujer de antes que fue a la casa de Shelly a pedir dinero. En ese momento, Zoe parecía haber recuperado su educación como hija de una familia noble y fue muy educada.
—¿No puedes hacerlo tú misma?
—Acabo de llamar —había intentado llamar a Nox cuando Shelly fue a gestionar los trámites de seguimiento para su ingreso—. Pero Nox no contestó.
Nox nunca más le prestaría atención
—Eso es problema tuyo.