Varado

El cielo sobre la Llanura de Moonriver era gris y poco amigable. Gotas de agua fría caían desde arriba, y los vientos soplaban sobre el yermo estéril, aullando mientras se sumergían en los cañones.

Lluvia se sentó frente al fuego crepitante durante unos minutos, mirando sombríamente a la distancia. Su cuerpo estaba magullado, pero no había heridas graves. Su mente estaba clara.

Era solo que la situación era un poco desalentadora.

Lluvia suspiró profundamente, luego inspeccionó su entorno. Bueno… no había mucho que inspeccionar. El yermo pedregoso era casi sin rasgos distintivos. Había unos pocos árboles torcidos y muertos a una docena de metros o algo así de distancia. Más allá, lejos, se erigía una ruina desgastada... el cañón estaba del otro lado, a un tiro de piedra de distancia.