Regreso a casa

Una densa niebla envolvía las costas de un mar nebuloso. Debajo de ella, las olas continuaban su asalto eterno contra la indiferente barrera de tierra, soñando con arrasarla. Murmuraban suavemente, tal como lo habían hecho durante eones. No muy lejos, el agua era más ruidosa: allí, un ancho río caía al mar, formando una profunda ensenada creada por su estuario.

En ese momento, había un grupo de jinetes moviéndose a lo largo de la costa. Sus corceles eran Ecos de abominaciones abatidas; su armadura encantada estaba empapada con el rocío de la mañana. Sus capas de color bermellón llevaban el emblema del Clan Valor.

Eran Caballeros y Escuderos que habían sido dejados atrás para proteger las afueras del Dominio de la Espada, actualmente en patrulla.