Al mismo tiempo, los diversos poderes del mundo de las artes marciales antiguas atrincherados en la Región del Mar Oriental seguían atacando sin freno.
Sin embargo, también detectaron algo inusual, ¡lo que causaba que muchos se sintieran inquietos!
¡Estaba demasiado tranquilo!
Durante el camino, no se vio ni una sola patrulla de la División del Dragón, lo cual era completamente diferente de la usual estricta seguridad.
¿Acaso la División del Dragón ya no podía resistir más?
¿O estaban planeando una gran conspiración, deseando lanzar una Red Celestial?
—Hermano Mayor, ¡parece que no hay emboscada en las aldeas adelante!
Una mujer vestida con el atuendo de la Secta Nebula dijo:
—Todavía nos faltan unas cien personas para explotar la vena espiritual. ¿Debemos barrer de nuevo?
El hombre llamado Hermano Mayor, con expresión grave, dijo:
—¡No actúen precipitadamente!
Ahora no era el momento de actuar, el silencio era lo que más lo aterraba.