1937

Al escuchar las palabras de Ethan Smith, sus rostros se tornaron pálidos de ira y un espíritu asesino brotó inconscientemente.

Ethan Smith, con su sentido divino altamente sensible, captó rápidamente esta intención asesina.

Sus ojos de manera intencional e involuntaria miraron hacia aquí, seguidos de una risa fría y continua.

—Llegaron bastante rápido —murmuró Ethan Smith en su corazón.

Frente a estas personas, Ethan Smith no tenía el menor miedo. No creía que se atrevieran a hacer algo frente a tanta gente.

Más aún, Ethan Smith continuó gritando con aún más entusiasmo.

—¡Daniel Wilson! Yo, Ethan Smith, te digo hoy que Emily Taylor me pertenece, ¡no a ti!

—Como el Joven Santo Señor Wilson, no creo que tengas miedo de mí. ¡Si lo tienes, dímelo!

—Todos sean testigos por mí. Si me pasa algo, debe ser que la familia Wilson se asustó por mí, ¡jajaja!

Ethan Smith gritó en voz alta, amplificando su voz con el altavoz, extendiéndola en todas direcciones.