—¡Acabo de darme cuenta de lo que está pasando! Fiona Reiser sabía que no podía vencer a Xaviera Evans, por lo que nos usó para conspirar contra ella, dejando a Xaviera indefensa ante nuestras acusaciones. ¡De esta manera, podría robar el prestigioso título del Doctor Caras, dejando al verdadero Doctor Caras manchado e incapaz de recuperar su reputación!
—¡Qué zorra tan manipuladora!
La opinión pública rápidamente se revirtió, con las maldiciones casi engullendo a Fiona.
Con Sir Tangi testificando personalmente, ya no era necesario la competencia. Además, ante el talento y habilidad absolutos, todos estaban seguros de que Xaviera no había hecho daño a Fiona.
—¡Llamen a la policía inmediatamente y lleven a esta malvada mujer que ha incriminado a Xaviera! —ordenó fríamente Sir Tangi.
Las piernas de Fiona se debilitaron, y casi se desplomó al suelo. Soportó el dolor en sus manos, lágrimas cayendo como lluvia, sus labios sangrando por morderlos.