Testigo de mi poder

—Sé quién es —continuó el hombre en el coche.

Sin necesidad de verificar, Lu Heting sabía que la única persona que podría haber hecho esto era Lu Tianci.

Como Lu Heting había organizado que hubiera gente aquí, muchas partes de la producción estaban bajo estricto control. Sin embargo, aún había una laguna que se podía explotar. Aparte de Lu Tianci, nadie más podía hacerlo.

Los dos dobles de acrobacias estaban impactados y un poco temblorosos, porque pedirles golpear a su empleador… Después de todo, para poder pagar una suma tan grande para tratar con una protagonista en un equipo de filmación, debían tener algún poder en el País T. Las consecuencias de pedirles golpear a su empleador eran inimaginables.

—N-Nosotros

Eran demasiado cobardes hasta para negarse.

El hombre en el coche guardó silencio por un momento. Justo cuando pensaron que iba a ceder, continuó hablando, pero no a ellos. Estaba hablando con la gente a su alrededor.