Aunque Josh Donovan estaba algo desconcertado, no se arrepentía, como dijo el Presidente Ross. Aunque no anticipó las consecuencias, seguía apoyando sus decisiones.
Pronto, Josh estaba empacando sus maletas para unirse al equipo, pero debido a problemas financieros, el equipo estaba planeando retrasar indefinidamente el inicio del rodaje.
Después de escuchar esto, Josh supo inmediatamente que algo estaba mal, por lo que llamó al director para pedir una explicación. El director suspiró y dijo:
—No sé quién ha ofendido a nuestro accionista principal. Retiraron su inversión así de fácil. ¡Josh, lo siento mucho!
Josh se sintió como si hubiera sido golpeado por un rayo, dejando su mente en blanco. Se dio cuenta de que el capital podía jugar sin tener en cuenta el fruto del trabajo de otras personas.
Pensando que todo era obra del Presidente Ross, Josh estaba furioso, pero ¿qué podía hacer?
Poco después, el Presidente Ross visitó a Josh de nuevo, actuando muy cortés: