—¿Por qué? ¿No dijo ella que yo llegaría a término? —Mónica Baldwin se alarmó de repente—. Estoy bien, ¿por qué adelantaría la fecha de parto?
—La hipertensión inducida por el embarazo, aunque no es una enfermedad terminal, podría de hecho arriesgar tu vida... No puedo arriesgarme ni un poquito —respondió Víctor Chadwick—. Entonces, acordé con Arthur Baldwin entregar antes de tiempo.
Mónica se quedó atónita por un momento, incapaz de digerir esta realidad.
—¿Cuáles son las consecuencias de un parto adelantado?
—Tanto la madre como la hija estarán a salvo. La única posible consecuencia es que el niño pueda desarrollar complicaciones.
Víctor le contó la verdad a Mónica.
Al oír esto, Mónica negó con la cabeza:
—Puedo aguantar, no hay necesidad de un parto temprano. No me importa lo que le ocurra al niño después del nacimiento, pero mientras esté dentro de mí, haré todo lo posible para darle una vida completa. No puedo dejar que sufra más tarde por mi culpa.