Capítulo 877

Keira y Lewis siguieron a Escarlata de vuelta a su casa.

La casa de Escarlata no era solo una casa, era una propiedad completa, con el personal funcionando como un reloj.

Keira y Escarlata compartieron un coche, mientras que Lewis fue enviado a viajar con el equipo de seguridad. El asistente se sentó al frente en el asiento del pasajero, mirando ocasionalmente al espejo retrovisor donde las dos chicas charlaban como viejas amigas.

Keira usualmente era callada, pero Escarlata claramente había decidido que había encontrado un alma gemela. Ella parloteaba sin parar, sus palabras salían en una ráfaga.

La niña mimada y mandona que habían conocido antes se había ido. Ahora todo era sonrisas y afecto, llamando a Keira "Querida Norma" cada dos por tres, como si fueran mejores amigas de la infancia.

Keira escuchaba con un oído, su mirada vagando hacia el paisaje que pasaba por la ventana.