Nadie.
No había nadie afuera.
Las piernas de Xu Tian temblaron y, como si hubiera tenido una epifanía, de repente se relajó.
—Es el equipo de producción, ¿verdad? Todos estaban tratando de hacerme una broma, ¿cierto? Qué infantiles... ¡Miren, no estoy asustado! —Xu Tian se rió nerviosamente, tratando de convencerse a sí mismo.
Pero el pasillo afuera estaba completamente vacío.
Sin luces, sin sombras, sin miembros del equipo escondidos con una cámara. Solo silencio.
Sus manos estaban frías. Giró la cabeza ligeramente para mirar hacia su cuarto.
De repente, sintió como si alguien le estuviera masajeando el cabello. El cuerpo entero de Xu Tian se congeló.
Al principio, el toque fue gentil, como si alguien jugara con su cabello. Pero luego
El agarre se apretó.
El corazón de Xu Tian latía frenéticamente. Su respiración se atascó en su garganta. Los dedos en su cabello se torcieron, tirando fuerte. Un dolor atravesó su cuero cabelludo.