Ocultando algo...

Lu Lian giró la cámara del teléfono celular hacia Lu Lijun —Aquí está él, madre.

Lu Lijun miró torpemente la cámara pero no sabía de qué hablar mientras los demás permanecían en silencio.

—Felicitaciones, hijo —habló Ning Jiahui, y él respondió, —Gracias, madre.

Justo entonces, todos oyeron la voz fuerte del viejo —Déjame hablar con él.

El Anciano Lu sostuvo el teléfono celular —Pequeño granuja, ¿has olvidado a tu abuelo?

Lu Lijun se sintió culpable ya que no tenía el valor para faltarle el respeto a su abuelo —No, abuelo.

—Regresa pronto a casa para que podamos celebrar este día juntos —instruyó el Anciano Lu, pero Lu Lijun no respondió ya que nunca había planeado volver a casa.

—¿Por qué no hablas? —preguntó el Anciano Lu, y Lu Lijun no tuvo más opción que asegurarle algo, —Sí, abuelo.

—Así me gusta, mi nieto —Al momento siguiente, la voz del Anciano Lu se suavizó ya que sabía que se sentían culpables hacia Lu Lijun.