Elogio involuntario...

Los tres continuaron el almuerzo en paz donde Lu Lian evitaba mirar a Ming Rusheng y seguía tarareando lo que decía el Señor Wong.

—Rusheng, ¿cuándo te vas a casar? —preguntó de repente el Señor Wong.

—No tengo tal plan —respondió Ming Rusheng.

—Pero estoy seguro de que tu abuelo debe tener algo bajo la manga —agregó el Señor Wong.

—He decidido ignorar a todos los viejos molestos a mi alrededor —habló Ming Rusheng.

—¿Molestos? Aunque es cierto, como Ming Shihong y Lu Haun ambos son así —comentó el Señor Wong.

—Mi abuelo no es molesto —interrumpió Lu Lian a los dos.

El Señor Wong sonrió levemente mientras Ming Rusheng hablaba, —Cuando sepas lo que nuestro abuelo trama a nuestras espaldas, no pensarás lo mismo.

—Lo que sea que haga mi abuelo, estoy segura de que es por mi bien —replicó ella, mirándolo fijamente.

—¿De verdad? —preguntó él, levantando una ceja en señal de pregunta.

—Hmm —respondió ella firmemente, devolviéndole la mirada.