Dar y recibir - Parte 1

Más de una hora o dos habían pasado desde que Penélope y Damien habían llegado al bosque, escuchando a los grillos y a las hojas rozarse entre sí, pasaron su tiempo hablando el uno del otro. Penélope escuchaba los recuerdos de Damien, ya que parecían estar llenos de travesuras en comparación con los suyos.

—La Señora Keith solía ser quien a veces nos cuidaba y a menudo lográbamos escaparnos de ella. Es una mujer amable por haber tolerado a Alejandro y a mí —dijo Damien mientras miraba lejos hacia los árboles. Cuando volvió a mirarla, dijo:

— Has estado sonriendo durante más de diez minutos ahora.

La sonrisa de Penny solo se hizo más amplia.

—Es bueno escuchar tus recuerdos de infancia. ¿No se enfadó tu madre cuando encontró la sangre en ti? —le preguntó después de que él le contara la historia de cuando habían ido a buscar brujas negras.