Mover la fecha de la boda

—¿Qué más podían decir Jia Li y Fu Hua? Llegaron a entender que su pequeña presta atención cuando los adultos están comiendo y al verlos comer un bocado, debió pensar que un mordisco de su papá no dejaría nada para ella.

—Princesa, papá cumple su palabra, mira... —dijo Fu Hua mientras tomaba un pequeño bocado y le devolvía el resto.

Jia Li agregó desde un lado:

—Jazmín, mira, papá solo tomó un pequeño bocado como dijo. Aprende a confiar en papá.

La niña asintió comprendiendo antes de empezar a comer ávidamente.

—Aquí está tu recompensa por ser generosa —dijo Jia Li mientras sacaba otra rodaja de su plato y se la daba a ella.

Jazmín estaba encantada y le agradeció a su madre. Ahora, no se arrepentía de haberle permitido a su padre tomar un bocado de su rebanada de manzana.

Jia Li también le dio unas rodajas a Fu Hua para que pudiera disfrutar con ellas también.