Rechazo

Fu Juan salió del estudio de su padre, luciendo más malhumorada que antes.

El Mayordomo Li y Lanying podían adivinar que las cosas no habían ido bien, dado que ella no logró ocultar su expresión facial.

—Lanying, vamos —Fu Juan tomó la mano de Lanying y se marcharon juntas. Cuando llegaron a su habitación, Lanying intentó sondear haciendo preguntas, pero Fu Juan eligió no dar una respuesta directa.

—Parece que todos están enojados porque no les conté sobre ti antes de hoy. No te preocupes, resolveré este asunto por mi cuenta, no tienes que preocuparte por ello —dijo Fu Juan.

Ella seguía insatisfecha con la reacción de su familia a su elección de vida. Creía que estaban siendo mezquinos ya que no tenía que explicarles su vida para que la entiendan.

Mientras Fu Juan y su hija descansaban, los jóvenes de la Familia Fu regresaron de sus diversos lugares, solo para enterarse de un cierto joven que su tía había traído e introducido como su hija adoptiva.