Gran Recompensa

Los padres de los dos especiales hermanos IA gato caminaban por el pasillo tras haber salido de la sala de ordenadores. Se dirigían de vuelta a su suite donde pronto se serviría la cena.

Jin Liwei se detuvo de repente y atrajo a Iris hacia él en un estrecho abrazo. Ella se sobresaltó un poco pero aún así correspondió al abrazo, cuidando de no presionar sobre sus heridas en la espalda. Cuando casi había pasado un minuto y él todavía no la había soltado, empezó a sentirse preocupada.

—¿Qué pasa, querido? ¿Estás bien? —ella hizo un sonido en su garganta pero ella no estaba segura de cómo interpretarlo.

—¿Todavía te duele? —preguntó a continuación.

—Manejable. —él no respondió de inmediato pero eventualmente dijo.

La culpabilidad la carcomía. Debe de estar todavía doliendo. —Lo siento.

—¿Por qué? —finalmente aflojó su abrazo pero aún no la soltó del todo.