Mejor Hacker del Mundo

El líder entrecerró los ojos ante su propia pantalla de ordenador, sus dedos se movían sin parar sobre el teclado, antes de soltar una carcajada. —Ya no hay necesidad de preguntarse qué bastardo está defendiendo valientemente contra nuestro ataque a la Corporación Jin en este momento. Saluden a nuestro viejo amigo y rival, mis hermanos. ¡El jodido Drakon! ¡Ahahaha!

—¡Hijo de puta arrogante! ¡Siempre interponiéndose en nuestro camino! ¡Mira cómo te machaco con todos los nuevos virus que he creado! ¡Toma eso, lagartijita!

—Mierda, ya me ha sacado. ¡Maldita sea!

El líder se concentró aún más en la batalla de hackeo. Una ferocidad sanguinaria brillaba en sus ojos, pero lo interesante era que no había animosidad dirigida hacia su duro oponente, solo pura emoción y competitividad ardiente. De hecho, su boca se estiraba en una amplia sonrisa, dándole un aire encantadoramente pícaro.