Ran Xueyi sabía que estaba tirando de sus restricciones.
Lu Chengyu era una persona ambiciosa y codiciosa. Pero tenía la sensación de que no era así en el pasado. Era desafortunado que Ran Xueyi no pudiera recordar completamente sus memorias. Sin embargo, era suficiente para ella saber que lo que habían experimentado en la isla en el pasado los cambió, de una manera u otra.
Quizás ella era una de las afortunadas que pudo escapar del alcance de esa organización. En cuanto a los demás… encontraron su propia forma de escapar, a través de la muerte.
No obstante, todos obtuvieron lo que querían.
Lu Chengyu y los otros que se quedaron y fueron capturados también lo consiguieron. Deberían haberse rendido a las formas de enseñanza de la organización y aprendido a vivir según sus reglas.