¿Estás dispuesto a pagar el precio por la verdad?

De alguna manera, la explosión de indignación en el corazón de Harlow, al pensar que estaba encantada viendo cosas que no estaban allí, se calmó de inmediato ante la visión de Rafael sosteniéndola fuertemente entre sus brazos. Él enterró su rostro en su hombro, luciendo muy miserable.

—¿Lo siento...? ¿Por qué?

Esto parecía más loco que nunca. Rafael era realmente un ser confuso con muchos nombres, un pasado misterioso, una actitud secreta, rodeado de demonios y deleitándose en la magia.

Harlow sabía que había algo raro en este hombre que no la hacía sentir cómoda aceptando su mano en matrimonio.

—Rafael... —Harlow intentó apartar al hombre, pero él no se movía.

Por primera vez, Harlow pensó que finalmente le veía en un estado emocional y estaba confundida como el infierno. No sabía qué estaba pasando.