—¿Lo oíste, Isabelle... Lucas? ¡Tendremos dos Pequeños Davis! —dijo el Abuelo Lu entusiasmado, sujetando los hombros de Lucas.
—¡Sí, Papá! ¡Ahora tendré dos nietos de una vez por ser abuelo por primera vez! Estoy tan feliz. ¡Hijo, buen trabajo! ¡Sé que trabajaste duro por esto! —Lucas le dio a Tristán un pulgar hacia arriba, guiñándole un ojo.
Tristán solo pudo reír al ver su reacción tan alegre.
—¡Lillie! Gracias por proteger a nuestros Gemelos Davis. Prometo que te ayudaré a criarlos. ¡Voy a ser una buena abuela para los gemelos! —Isabelle abrazó a Zhen-Zhen por tanta felicidad. Estaba realmente agradecida.
Cuando Isabelle rompió el abrazo, se dio cuenta de que la barriga de embarazada de Zhen-Zhen había crecido mucho. Reflejamente, le acarició la barriga, con los ojos llenos de amor. Era la mejor sensación convertirse en abuela, especialmente de gemelos.