Sé feliz como una gran familia

Tristán llegó a casa. Fue recibido inmediatamente por el cálido abrazo de Zhen-Zhen.

—¿Está todo bien, Tristán? ¿Por qué llegaste tarde a casa? —le preguntó Zhen-Zhen con preocupación.

Tristán suspiró profundamente antes de estrechar a Zhen-Zhen en un abrazo.

—Hace un rato atropellé a alguien. La llevé al hospital. Afortunadamente, no resultó gravemente herida.

Zhen-Zhen se sobresaltó al escuchar eso.

—¿Estás bien? Debes estar en shock, ¿no? —Zhen-Zhen lo miraba elevando la vista, sosteniendo la cara de Tristán.

Tristán puso una cara de pena antes de asentir con la cabeza. Zhen-Zhen se puso de puntillas, besando sus preocupaciones. Lo cubrió de besos intentando consolarlo y animarlo.

—Vamos a cenar con abuelo, mamá y papá —Zhen-Zhen tiró de Tristán hacia el comedor.

Los padres de Tristán y el Abuelo Lu ya estaban allí, esperando a los esposos.

—Tristán, Lillie... vengan, vamos a comer —los llamó Isabelle.