La Promesa

Después de hablar con sus primos, Tristán volvió a la sala donde FaMo y Zhen-Zhen estaban conversando. Le dio a Zhen-Zhen una hora para arreglarse para su cita de hoy.

Ella llevaba un vestido floral rosa sin hombros que llegaba hasta sus rodillas, su largo cabello ondulado cayendo sobre sus hombros. Aún se veía bonita y deslumbrante con su cabello y maquillaje sencillos.

FaMo la seguía de cerca. Tristán se acercó inmediatamente a Zhen-Zhen, guiándola mientras descendían por las escaleras. Ambos se despidieron de sus padres antes de salir de la Mansión Davis.

La emoción se podía ver en los ojos brillantes de Tristán. Sonreía de oreja a oreja mientras la guiaba hacia su coche. Entrelazaron sus manos después de acomodarse dentro.

Mientras tanto, FaMo optó por sentarse en el asiento trasero del pasajero, simplemente observando a la dulce pareja frente a él.

—Cariño, ¿a dónde quieres ir primero? —preguntó Tristán mientras arrancaba el coche.