KAYDEN (13)

Tiana miraba fijamente con los ojos muy abiertos lo que Reymond había hecho a Kayden. Era un completo imbécil por haberle quitado el tubo de oxígeno a Kayden.

—¡Detente! ¡Lo matarás! —gritó Tiana con furia, avanzó con la intención de hacer lo que fuera necesario para lastimar al loco padre de Oliver.

Ahora Tiana sabía de dónde Oliver había sacado su locura.

Pero luego, casualmente, Reymond sacó un arma de su cintura y la apuntó a la frente de Kayden mientras le sonreía dulcemente a Tiana.

—Ahora dime, ¿quién mató a mi hijo? —la voz calmada de Reymon era más aterradora que cualquier cosa y sus ojos destellaban venganza.

—¡Yo! ¡Yo maté a tu hijo! —exclamó Tiana, ella vio que Kayden tenía problemas para respirar, incluso con sus ojos cerrados—. Ahora vuelve a ponerle el oxígeno.

Al escuchar esta declaración, Reymon soltó una carcajada, como si acabara de oír el chiste más gracioso de su vida.