Sin resistencia

Mientras Rain se acercaba a las formaciones rocosas para echar un vistazo más de cerca, una sensación de inquietud se apoderó del grupo. Los mugus parecían retorcerse y moverse con una vida inquietante por sí mismos gracias a la oscuridad. La vista espeluznante hacía que todos sintieran como si algo pudiera salir de ellos en cualquier momento.

Entre ellos, la gente del mar, que estaba acostumbrada a formaciones rocosas bajo el agua, no podía evitar sentirse un poco perturbada por las reacciones. Para ellos, estas formaciones les recordaban a sus hogares submarinos, sin embargo, los habitantes de tierra parecían verlas con una mezcla de miedo e incomodidad.

—Son solo las sombras, chicos —dijo Rain—. Realmente no se están moviendo. Ustedes se preocupan demasiado.

—Pareces estar moviéndote en una dirección muy particular. ¿Podemos preguntar por qué? —preguntó Regis.

—Solo estoy siguiendo mi intuición y de vez en cuando el consejo de las reliquias —se encogió de hombros Rain.