Salida

En los días siguientes, Rain se encontró sumergido en diversas tareas mientras supervisaba los preparativos para su viaje hacia los mundos inexplorados. Con la ayuda de Sakaki, Rain fabricó numerosas lentes que dispuso estratégicamente para crear un telescopio mágico. Este nuevo dispositivo le permitió analizar las trayectorias y direcciones de sus destinos previstos, optimizando su ruta y asegurando que no se perdieran nada significativo.

La construcción del telescopio mágico fue un esfuerzo largo y grupal, con muchas manos contribuyendo a su montaje. Rain observó el proceso intrincado, impresionado por la eficiencia y el trabajo en equipo de los involucrados. Las lentes, cada una cuidadosamente imbuida con propiedades mágicas, se conectaron sin problemas para formar una herramienta poderosa que podría expandirse indefinidamente. Cuantas más lentes fabricaba Rain, mejor se volvía.