Destrucción

—Amigo, esa es mi línea —dijo Rain—. Enviaste a tus secuaces a atacarnos junto con otros imbéciles. La audacia que tienes para decir eso…

El caballero mecánico dorado se erguía alto e imponente, distinto de sus subordinados. Su armadura metálica brillaba con un tono dorado pulido, adornada con intrincadas líneas azules que cruzaban su cuerpo. Las líneas parecían pulsar con energía, dando la impresión de un poder formidable fluyendo a través del caballero.

A diferencia de los otros caballeros mecánicos armados con escudos y lanzas, esta figura dorada empuñaba dos espadas amenazantes hechas de mana azul oscuro. Las espadas emanaban un aura de otro mundo, y los bordes parecían estar constantemente cambiando y reformándose, dando una sensación ominosa de imprevisibilidad. El diseño del caballero exudaba un aire de autoridad, sugiriendo que era una fuerza superior entre las filas mecánicas.