[Perspectiva de Nala, Llyniel, Leira, Sera, Ella y Halime]
Las siete observaron a Tiamat, la diosa dragón, mover su mano erradicando a los Terravains con facilidad antes de girarse hacia ellas con una sonrisa —Ella, Sera, levántense, ustedes dos. Somos amigas y hermanas, así que nunca más se arrodillarán ante mí.
Ella negó con la cabeza y se puso de pie —¿Qué ocurrió? —preguntó.
—Es mi aura divina. Cuando aparezco, afecta a los dragones a menos que la controle. Pero la he desactivado por ti, Sera, y las demás —dijo Tiamat con una sonrisa cómplice.
—¿Otras chicas? —preguntó Leira.
La sonrisa de Tiamat se hizo aún más amplia —Las hermanas semihumanas las han desbloqueado o están en proceso de hacerlo, mientras que las demás se han vinculado con el maná de Archer y el universo las ha considerado dignas de regalos.
Los ojos de las seis chicas se abrieron de par en par cuando Sera habló emocionada —¿Quién es dragón?