730 Todos los abrazos

Wolfe dejó a la patrulla terminar su trabajo y voló el resto del camino de regreso a la Arboleda del Bosque. Las brujas ya lo estaban esperando, listas para él, con una decoración especial para la fiesta añadida a las del Festival.

El hecho de que todo el mundo ya estuviera reunido para el Festival hizo las cosas mucho más fáciles. Sin embargo, la afluencia adicional de visitantes y el hecho de que nadie se había ido según lo planeado una vez que se enteraron de que Wolfe había logrado superarse hacían que la ciudad estuviera increíblemente abarrotada.

Había destinos peores que tener que dormir en el suelo, aunque y a diferencia del grupo que tenía el poder de llegar directamente al volcán para recoger su buena suerte, la mayoría de los invitados aquí no tenían ni el poder para llegar de prisa ni los sentidos para saber que estaba sucediendo hasta que se les informó.