—Señor Sabio... ¿Lo estás disfrutando o debería menearlas más? —preguntó la chica gigante con una sonrisa.
Anon está ahora tumbado dentro del escote de una chica gigante y ella está meneando sus pechos lentamente, dándole a todo el cuerpo de Anon un masaje relajante.
—Esto es lo mejor... —Anon habló con una sonrisa mientras inmediatamente agarraba sus grandes pezones con ambas manos y comenzaba a succionarlos, aunque sus pezones eran realmente enormes, Anon no podía meterlos completamente en su boca... Pero los estaba lamiendo vigorosamente y mordiéndolos ocasionalmente.
—Anhhh~ Anhhh~ Señor Sabio... Estás mordiendo mis pezones muy fuerte, me hace cosquillas en el coño allá abajo —la chica gigante habló mientras apretaba el espacio entre sus pechos para darle a Anon más placer.
—¿Dónde está Damon? —Anon preguntó mientras miraba alrededor y notaba que otra chica gigante estaba tumbada a su lado con las piernas en el aire.