—Tierra Prohibida... —Searoth se sorprendió cuando escuchó a Evan y lo miró extrañado—. ¿Por qué vas a la Tierra Prohibida? No me digas que después de poner patas arriba al Imperio Gehena, ahora quieres meterte con los bárbaros que viven allí.
—Evan se quedó sin palabras cuando escuchó a Searoth y preguntó mientras se frotaba las cejas—. ¿Crees que estoy loco o algo así que le gusta causar caos por todas partes?
—Bueno... —Searoth no habló fuerte pero su expresión claramente decía, '¿No lo estás?'.
Líneas negras aparecieron en la frente de Evan cuando vio la expresión de Searoth, y tomó algunas respiraciones profundas para mantenerse tranquilo.