Abadón no sabía por qué dejó a Valerie.
No era frustración.
No fue porque ella lo lastimó.
Abadón simplemente se sentía... confundido.
Es difícil concebir cómo es para una deidad de la intimidad o el romance enfrentar la pérdida de una pareja.
Más allá del alcance de los sentimientos de posesión, sea correcto o incorrecto, poseen una necesidad innata de conexión que facilita toda su forma de ser.
Afrodita todavía mantiene contacto con cada pareja de orgías que ha tenido hasta este día, ya sea por mensaje, enviando pájaros o redes sociales.
Perder una pareja no es muy diferente de perder un brazo para ellos. Realmente no importa cuántos hayan tenido o tendrán; esa distinción nunca cambiará.
Valerie en realidad no se había ido a ningún lado todavía, pero Abadón estaba haciendo su mejor esfuerzo para imaginar cómo sería su vida sin ella cada día.