Como Un Animal

Usando el control remoto inteligente para el ático, Alexander abrió todas las ventanas de la habitación, dejando que la brisa de fin de verano entrara a raudales. Podía sentir el frente frío en el aire, una señal de que el otoño se acercaba.

Mientras se dirigía hacia la ducha, la mente de Alex divagó hasta el primer día que entró en Nuevo Edén, cuando había pasado por este proceso de convertirse en mago. Había estado lejos de pensar que esta posibilidad alguna vez le sucedería en este mundo.

«Ya han pasado casi cuatro meses... Es difícil creer que nadie haya alcanzado el nivel sesenta aún. Los desarrolladores no estaban bromeando cuando dijeron que subir de nivel sería difícil en Nuevo Edén...», pensó.

De repente su mente volvió a la realidad cuando escuchó caer un conjunto de ropa al suelo. Miró la espalda desnuda de Kary, sus marcas reales en amplia exhibición, y se mordió los labios.