Kary estaba atónita, por un momento, absorbiendo sus palabras como rayos en su cerebro.
—¿Perdón, qué?
Alex la miraba con ojos llenos de arrepentimiento.
—Creo que hice que Zagan se sintiera tan ofendido que decidió hacer un hechizo impensable y creó al señor demonio...
—Vas a tener que explicarme esto con detalle. Tus palabras llegan a mi cerebro, pero no las entiendo —dijo Kary, atónita.
Así que Alex hizo justo eso. Se tomó el tiempo para explicar la situación que había sucedido con Constantine, primero, ya que era parte de la historia, antes de pasar al incidente con Asmodeo, que llevó al de Salomón.
Permaneció sentado en el frío suelo de cemento de su balcón, con la espalda contra la barandilla de cristal, lo que pareció una eternidad narrando los eventos. Para cuando terminó, Kary también estaba en el suelo, con su mente girando entre la incredulidad y el shock.
Alex la miraba con ojos entristecidos, preguntándose qué pensaría ella de él.